Versos del 1 al 2
Salomón, tenía la intención que esta fuera una espectacular “ceremonia de apertura” para el Templo. Estaba en la escala de las grandes producciones, de las ceremonias de apertura de nuestros modernos juegos Olímpicos.
El Templo no estaba “abierto”, sino hasta que el Arca del Pacto fue colocado en el Lugar Santísimo.
El Arca era el artículo más importante en el Templo.
El Templo fue terminado en el octavo mes (1 Reyes 6, 38), pero Salomón eligió el séptimo mes para la dedicación, once meses después por un respeto común a la conveniencia de su pueblo.
Porque ahora, ellos habían juntado todos sus frutos y estaban por subir a Jerusalén, para celebrar la Fiesta de Tabernáculos.
Versos del 3 al 9
Salomón, tuvo el cuidado de obedecer lo que YEHOVAH DIOS había ordenado sobre transportar el Arca del Pacto, que solamente debía ser cargado por los Sacerdotes, no repetiría el error de su padre en 2 Samuel 6, 1-8.
El Arca del Pacto. era el artículo más importante en el Templo, pero no era el único artículo. Ellos también trajeron el candelero, la mesa de los panes de la proposición y el altar del incienso del Tabernáculo hacia el Templo.
Había dos Tabernáculos, uno en Gabaa y otro en la ciudad de David, donde David había construido como una residencia temporal para el Arca.
“Sacrificando ovejas y bueyes que por la multitud no se podían contar ni numerar”, Salomón “se brincó la barda”, en su esfuerzo para honrar y alabar a YEHOVAH DIOS este gran día.
En el Arca, solo estaban las dos tablas de piedra, que había puesto Moisés en Horeb, en un punto anterior en la historia de Israel, había tres artículos en el Arca del Pacto.
Anteriormente, dentro del Arca, estaba una olla de oro que tenía el maná (Éxodo 16, 33), la vara de Aarón que reverdeció (Números 17, 6-11) y las tablas del Pacto (Éxodo 25, 16).
Aún no sabemos, que le ocurrió a la olla de oro con maná y a la vara de Aarón, pero según lo descrito no estaban en el Arca, cuando Salomón la colocó en el Lugar Santísimo o simplemente se omitió el nombrarlos, para resaltar el aprecio a la Ley.
Hay un significativo recordatorio de la liberación de Egipto, algunos quinientos (500) años después del Éxodo, su culminación.
Fuera de Egipto y dentro del desierto Israel, por necesidad vivió en tiendas el pueblo y la morada de YEHOVAH DIOS era una tienda.
Ahora, ya Salomón había edificado el Templo, la Morada de YEHOVAH DIOS en medio de Israel fue un edificio, un lugar de permanencia y seguridad.
Versos del 10 al 13
Esta era la nube de gloria, vista a menudo en el Antiguo y Nuevo Testamento, algunas veces llamada la nube de gloria “Shekina”.
Es difícil el definir la gloria de YEHOVAH DIOS, podríamos llamarla la “radiante brillantez de Su carácter y presencia”.
Aquí es manifestada como una nube.
1. Es la nube, que estuvo con Israel en el desierto (Éxodo 13, 21-22).
2. Es la nube de Gloria, de la cual YEHOVAH DIOS habló desde allí con Israel (Éxodo 16, 10).
3. Es la nube, de la cual YEHOVAH DIOS se encontró con Moisés y otros (Éxodo 19,9. 24. 15-18; Números 11, 25; 12, 5; 16, 42).
4. Es la nube, que estuvo a la puerta del Tabernáculo (Éxodo 33, 9-10).
5. Es la nube, de la cual YEHOVAH DIOS se apareció al Sumo Sacerdote, en el Lugar Santo dentro del velo (Levíticos 16, 2).
6. Es la nube de la visión de Ezequiel, llenando el Templo de YEHOVAH DIOS con el resplandor de Su gloria (Ezequiel 10, 4.)
7. Es la nube de Gloria, que ensombreció a María cuando ella concibió a Jesús por el poder del Espíritu Santo (Lucas 1, 35).
8. Es la nube presente en la transfiguración de Yeshúa Ha Mashiaj (Lucas 9, 34-35).
9. Es la nube de Gloria, que recibió a Yeshúa Ha Mashiaj en los cielos durante Su ascensión (Hechos 1, 9).
10. Es la nube, que mostrará la Gloria de Yeshúa Ha Mashiaj, cuando Él regrese en triunfo a esta tierra (Lucas 21, 27,;Apocalipsis 1, 7).
Hay un paralelo con este evento en Hechos 2, 1-4 en la cual YEHOVAH DIOS marca el comienzo de la iglesia como el Templo del Espíritu Santo, al hacer su presencia conocida a través del sonido de un viento poderoso y repentino y al llenar a aquellos presentes con el Espíritu Santo.
La extrema presencia de la Gloria de YEHOVAH DIOS, hizo que el servicio normal fuera imposible. El sentido de la presencia de YEHOVAH DIOS, era tan intenso que los sacerdotes sintieron que era imposible el continuar en el edificio.
Esta Gloria permaneció en el Templo, hasta que Israel completamente rechazó a YEHOVAH DIOS en los días de la monarquía dividida. El profeta Ezequiel vio la Gloria dejar el Templo (Ezequiel 10, 18).
Salomón correctamente sintió, que la presencia de la nube significaba que YEHOVAH DIOS moraba en el Templo en una manera especial.
Siempre y cuando eso no se deslizara en malentendidos supersticiosos, era bueno el reconocer un lugar especial para venir y encontrarse con YEHOVAH DIOS.
Versos del 14 al 21
Salomón reconocía, que el templo fue el cumplimiento del plan de YEHOVAH DIOS, no de David ni de Salomón. David y Salomón fueron instrumentos humanos, pero la obra fue de YEHOVAH DIOS.
Salomón, rememora sobre el recuerdo del Éxodo. Aunque sucedió quinientos (500) años antes, era tan importante y real para Israel, como el día que se materializa el Santuario del Eterno Creador Padre TODOPODEROSO FIEL.
Versos del 22 al 23
Salomón no dedicó el Templo, desde dentro del Templo. Sería inapropiado para él hacerlo así, porque él era un rey y no un sacerdote.
El Lugar Santo y el Lugar Santísimo, eran únicamente para descendientes escogidos del Sumo Sacerdote.
“Extender las manos” era la postura de oración más común en el Antiguo Testamento.
Muchas personas modernas cierran sus ojos, inclinan su cabeza y juntan sus manos mientras oran, pero la tradición del Antiguo Testamento era el “extender las manos hacia el cielo en un gesto de rendición”.
“Es la misma postura de un bebe que desea ser cargado por sus padres y lo manifiesta extendiendo las manos”.
Salomón reconoció, que YEHOVAH DIOS era completamente único. Los supuestos dioses de las naciones, no se podían comparar con ÉL en ninguna manera.
Versos del 24 al 26
Salomón primero, le dio gracias a YEHOVAH DIOS y le alabó por sus cumplimientos pasados de las promesas.
Llamó a YEHOVAH DIOS para que cumpliera la promesa que ÉL hizo.
Este es el gran secreto en el poder de la oración, el tomar las promesas de YEHOVAH DIOS hacia el corazón en Fe, después audazmente y reverentemente llamarle para cumplir las promesas.
Versos del 27 al 30
De su declaración en 1 Reyes 8, 12-13 pudiéramos haber pensado, que fue una idea supersticiosa de que YEHOVAH DIOS en realidad vivía en un Templo, excluyéndose de otros lugares.
Era importante el reconocer que, aunque YEHOVAH DIOS tenía una presencia especial en el Templo, ÉL era más grande para ser restringido allí.
Salomón, le pidió a YEHOVAH DIOS, que inclinara Su oído hacia el rey y el pueblo cuando oraran desde el Templo.
Por esta razón, muchos Judíos conservadores, oran con el rostro orientado hacia la dirección del sitio del Templo en Jerusalén.
Salomón sabía, que lo más importante que Israel necesitaba era perdón. Esta era la más grande respuesta a la oración, que Israel podría esperar de parte de YEHOVAH DIOS.
Versos del 31 al 32
Los terrenos del Templo, eran utilizados como un lugar para verificar y autenticar los juramentos.
Cuando la disputa se redujera a la palabra de uno en contra de otro, Salomón pidió que el Templo fuera un lugar, para hacer un juramento adecuado de ello.
Salomón le pidió a YEHOVAH DIOS, que puede ver lo que los hombres no pueden, quien conoce lo escondido del corazón del hombre y que fuerce desde el cielo los juramentos hechos en el Templo.
Versos del 33 al 34
Muchas veces en la historia, Israel sufrió derrotas y solamente podía clamar a YEHOVAH DIOS, fue peor cuando la derrota se debía a que ellos habían pecado contra YEHOVAH DIOS.
Salomón le pidió a YEHOVAH DIOS, que escuchara las oraciones de un Israel derrotado, pero humilde y penitente.
YEHOVAH DIOS, contestó esta oración de Salomón, ÉL perdona y restaura a Su pueblo derrotado cuando ellos vienen en un humilde arrepentimiento.
Versos del 35 al 40
La sequía, era una amenaza constante para la economía de Israel, basada en la agricultura. Si no había lluvia, no había comida.
Salomón, no toma por sentado que YEHOVAH DIOS perdonaría y escucharía a Su pueblo arrepentido.
La bondadosa repuesta de YEHOVAH DIOS, hacia nuestro arrepentimiento viene de su gracia, no de la justicia.
Salomón reconocía, que algunas plagas son fácilmente vistas, pero otras plagas vienen de nuestro propio corazón.
Muchos están maldecidos por la plaga que nadie más puede ver, pero vive en su propio corazón.
Salomón le pide a YEHOVAH DIOS, que conteste a dicho hombre golpeado, por dicha plaga cuando él humildemente suplique en el Templo.
Versos del 41 al 43
El Templo estaba en Israel, pero siempre tenía la intención de ser una casa de oración para todas las naciones (Isaías 56, 7).
YEHOVAH DIOS, quería que la corte de los Gentiles, fuera un lugar en donde las naciones pudieran venir y orar.
Salomón, le pidió a YEHOVAH DIOS, que escuchara la oración del extranjero, por un impulso misionero.
Él sabía, que cuando YEHOVAH DIOS misericordiosamente contestaba las oraciones de los extranjeros, esto acercaba a aquellos de otras naciones hacia YEHOVAH DIOS, de todas las naciones.
Versos del 44 al 53
Salomón, oró con la idea de que YEHOVAH DIOS, contestaría las oraciones por la victoria hecha en tierras extranjeras hacia el Templo, pero únicamente cuando ellos estuvieran en la batalla en la cual YEHOVAH DIOS les enviaba.
Esta no era una petición en blanco, pidiendo la bendición en cualquier aventura militar.
Todo hombre es pecador, constituye una base ineludible de verdad plasmada en el Antiguo Testamento, de un principio expuesto más claramente en Romanos 3, 23 “por cuantos todos pecaron y están destituidos de la Gloria de YEHOVAH DIOS”.
Salomón, también le pidió a YEHOVAH DIOS que escuchara la oración de Israel, desde la cautividad en la tierra extranjera. Esto reconocía, que podía contestar las oraciones hechas lejos del Templo.
Versos del 54 al 61
1 Reyes 8, 22 nos dice que Salomón, comenzó esta oración estando de pie, pero en algún momento antes de que terminara, cayó de rodillas en reverencia a YEHOVAH DIOS.
Esdras oró de rodillas (Esdras 9, 5), los Salmistas nos llaman a arrodillarnos (Salmos 95, 6), Daniel oró estando de rodillas (Daniel 6, 10), personas llegaban a Yeshúa Ha Mashiaj de rodillas (Mateo 17,14, Mateo 20, 20; Marcos 1, 40).
Esteban oró estando de rodillas (Hechos 7, 60), Pedro oró de rodillas (Hechos 9, 40), Pablo oró de rodillas (Hechos 20, 36, Efesios 3, 14) y otros cristianos primitivos oraban estando de rodillas (Hechos 21, 5).
Más importante, Yeshúa oró estando de rodillas (Lucas 22, 41).
La Biblia no tiene tantas oraciones estando de rodillas, para mostrarnos que no es requerido pero también tiene suficientes oraciones de rodillas, para mostrarnos que es bueno.
Ya que Salomón oró suplicando las promesas de YEHOVAH DIOS, por tanto, tiene sentido que él alabara a YEHOVAH DIOS, dando gracias por el cumplimiento de sus promesas pasadas. Sabiendo, que esto le daba confianza a Salomón en la oración.
Salomón sabía, que era importante el pedirle a YEHOVAH DIOS que cumpliera su promesa. Él viene suplicando por el cumplimiento de la voluntad del Altísimo que es buena, agradable y perfecta para Israel.
Además, muestra el impulso misionero que YEHOVAH DIOS quería en Israel y que a menudo era descuidado.
La bendición en Israel no tenía el fin de terminar con Israel, YEHOVAH DIOS quería bendecir al mundo a través de Israel.
Versos del 62 al 66
Esta es una asombrosa, casi grotesca ofrenda la cantidad de sacrificio de 22 mil bueyes y 120 mil ovejas, solo la ofrenda del rey.
Cada animal fue ritualmente sacrificado y una porción fue dedicado a YEHOVAH DIOS y una porción dada a los sacerdotes y al pueblo.
Era suficiente para alimentar a una vasta multitud por dos semanas.
YEHOVAH DIOS es dador (AMOR) por excelencia, celebrar su nombre es presentar ofrendas ante ÉL, lo más extravagante que podamos con toda fidelidad.
Por el tiempo del año y la extensión de esta Fiesta, entendemos que esta era la “Fiesta de los Tabernáculos”, alargada más allá de sus siete días normales en esta ocasión especial.
La “Fiesta de los Tabernáculos”, es en sí misma una gran ocasión para el regocijo y para un espíritu realzado de la comunidad entre los Israelitas.
La dedicación del Templo, hizo de esta ocasión que fuera más alegre y memorable, el tiempo de la celebración fue adecuadamente extendido.
Este hecho de dedicación del Templo termina, donde la historia del Templo comienza, con David, no con Salomón.
El escritor recuerda, que fue el corazón y visión de David, la cual dio comienzo a la obra del Templo (2 Samuel 7, 1-3 y subsecuentes).
¡Qué felices pudieron ser estas personas y qué prosperas sus descendencias, si su rey hubiera continuado su caminar rectamente delante de YEHOVAH DIOS!
Pero el rey cayó y la nación siguió su ejemplo.
Gloria a YEHOVAH Dios por como nos manifiesta la verdad a través de las Escrituras. De este capítulo me impresionó que ciertamente YEHOVAH no puede habitar completamente ni siquiera en el universo, menos lo puede contener un edificio. El templo era para la expresión del culto del pueblo, pero su morada estaba entre el pueblo de Israel.
También me interpela el hecho de que el hombre puede tergiversar en condición de pecado, todo lo que es bueno. El pueblo podía adorar al templo mas que a YEHOVAH, o hacer uso supersticioso del tabernáculo, como las ocasiones en las que fue llevada como un amuleto a la guerra sin haberlo consultado con él previamente. Cuando nuestros ojos espirituales están cerrados por el pecado, podemos llegar a tergiversas algo que fundamentalmente es bueno.