Mosqueteros de Yehovah

ORGANIGRAMA DE NUESTRO MINISTERIO​

En el libro de Números capítulo 2, se encuentra el diseño de Yehováh para establecer Su Gobierno en el campamento de Israel en el desierto.

Allí se puede apreciar la tienda de las citas divinas, donde operan el Sumo Sacerdote y los Levitas para interceder por sus hermanos presentando los sacrificios a Yehováh Dios, es el lugar de encuentro de Moisés con Yehováh, para recibir instrucción que debe ser obedecida por el pueblo. La tienda de las citas se encuentra en el centro del campamento, de tal forma, que su distancia para que las tribus accedan a la Presencia del Señor sea la misma.

Posteriormente se ubican las tribus en grupos de 3 en los 4 puntos cardinales, de manera que, Yehováh es quien Gobierna a Su pueblo, teniendo influencia sobre todos sus hijos por igual, acampando en derredor de si.

Está compuesto por grupos de tres tribus que ejercen tareas especificas para bendecir a sus hermanos de todas las tribus. Hay también, jefes de tribus o príncipes, luego jefes de mil, de cien, de cincuenta y de diez (Éxodo 18, 25), ordenados para dar cumplimiento a los Mandamientos de Yehováh Dios.


Este es el modelo idóneo, para dar cumplimiento a los Mandamientos de Yehováh en nuestro Ministerio. El orden, es establecido para servir a los propósitos del Altísimo Padre Yehováh de los ejércitos,
quien nos gobierna a todos, por medio de Su Palabra y de Su Santo Espíritu.

Bajo este concepto no son promovidos los que tengan mayores conocimientos, más bien, son promovidos, aquellos con mayor disposición para Adorar, Obedecer y Servir al Todopoderoso Yehováh de los ejércitos.

A medida que el ministerio avanza por la poderosa mano de Yehováh, se va configurando por la Gracia de su Santo Espíritu, el Organigrama en la región local, luego, por estado, posteriormente, nacional, para pasar a continental y finalmente de influencia mundial, dando cumplimiento a la Gran Comisión, para que de todas las naciones sean constituidas, los discípulos.

SOLO HAY VICTORIA EN YESHÚA HA MASHÍAJ AMÉN, AMÉN Y AMÉN