Versos del 1 al 22
La sequía. Una prolongada y mortal sequía es el motivo de esta especie de diálogo entre el profeta y YEHOVAH DIOS.
Los versos del 1 al 6 describen los efectos devastadores del fenómeno que azota a hombres y animales, lo que da pie para que el profeta dirija una oración a su Señor en nombre del pueblo (vs 7-9).
En ella se subraya el reconocimiento de la desobediencia y de la infidelidad del pueblo (vs 7).
Se insiste a Dios para que intervenga, para que no se quede indiferente ante semejante situación (vs 8-9).
YEHOVAH DIOS responde negativamente, revelando al mismo tiempo su intención de pedir cuentas al pueblo (vs 10).
La respuesta de Dios da oportunidad a Jeremías para entablar la discusión sobre el mensaje de otros profetas, que no vaticinan la guerra y la muerte cuando es un hecho que el pueblo las está sufriendo.
YEHOVAH DIOS califica a esos mensajeros como falsos profetas y anuncia también para ellos los mismos males castigos que evitan anunciar (vs 11-18).
De nuevo, el profeta dirige al Señor una oración en nombre de su pueblo, en la que reconoce una vez más la culpa y los pecados.
Se insiste en que el Dios de Israel es el único que puede rescatar a su pueblo de estos grandes males (vs 19-22).