Mosqueteros de Yehovah

Salmos Capítulo 7

El título Hebreo para este Salmo es “Sigaión de David, que cantó a YEHOVAH DIOS acerca de las palabras de Cus hijo de Benjamín”.

La palabra “Sigaión” se traduce como “meditación”, aunque la palabra es difícil de traducir y solo se puede leer también en Habacuc 3, 1.

La ocasión específica no se conecta fácilmente con un evento registrado en los libros históricos del Antiguo Testamento, puede ser una referencia velada a las acusaciones de Simei en contra de David en 2 Samuel 16, 5 o a los calumniadores de Saúl en contra de David.

Cus, hijo de Benjamín era otro partidista de Saúl en contra de David. El Salmo contiene tanto el clamor de angustia y la seguridad de la liberación de David.

Versos del 2 al 3

Un ruego lleno de confianza, cuando David estaba bajo el ataque de Cus, hijo de Benjamín, su confianza era YEHOVAH DIOS, cualquier otro soporte se había ido, pero no necesitaba de ningún otro.

Nada se conoce de Cus, pero de la rebelión de Absalón se puso en manifiesto que la tribu de Benjamín era enemiga de David (2 Samuel 16, 5; 20, 1).

En ocasiones la fortaleza de YEHOVAH DIOS es evidente en la ayuda que da a través de la prueba. David estaba convencido que el Señor le quería liberar de esta prueba.

David creía que habría graves consecuencias si él no fuera liberado de estos enemigos cual leones.

Este entendimiento le dio a David la urgencia de orar, YEHOVAH DIOS en ocasiones permite circunstancias difíciles para que despierten dicha urgencia en nosotros.

Es una descripción del peligro de la cual el Salmista fue expuesto por medio de las lenguas calumniadoras, las heridas de una espada sanarán, pero las heridas de la lengua cortan más profundo que la carne y no sanan pronto.

Versos del 4 al 6

El ruego de inocencia, con estas palabras David no reclamó una perfección sin pecado, solo rechazó la idea de una equivalencia moral entre sí mismo y sus enemigos.

David sabía que sus enemigos tenían sed por verle derrotado, estaba tan confiado en su justicia en comparación con sus enemigos, que estaba dispuesto a ser entregado hacia sus deseos, si es que ellos estaban en lo correcto.

Versos del 7 al 8

Una súplica por la intervención justa, David creía que YEHOVAH DIOS era un ser que poseía pasiones humanas como la ira y que las pasiones del Altísimo eran por parte de él, por ello, estaba o estaría airado por él en lugar de contra él.

No mantenía esta creencia de manera pasiva, activamente oraba por el cumplimiento de lo que creía sería la voluntad de DIOS.

La oración de David por protección y vindicación no era enteramente egoísta, sabía que su destino estaba vitalmente conectado al bienestar del pueblo de YEHOVAH DIOS, era en gran medida para el bien de ellos, el bien de la congregación.

Versos del 9 al 11

La defensa de David, era la actitud que lo protegía de la presunción, en honestidad invitó el juicio y corrección de YEHOVAH DIOS.

Esto revela más sobre el corazón de la oración de David, para que YEHOVAH DIOS fuera justo, no oraba por un favoritismo especial del Altísimo, sino buscó su propio corazón para ayudarse a estar bien delante del Señor.

David sabía que él tenía una desventaja insignificante delante de sus enemigos y tenía que confiar en la defensa que viene de YEHOVAH DIOS.

Versos del 12 al 14

YEHOVAH DIOS, el Juez Justo es la apelación principal de David hacia la demanda del hombre ante YEHOVAH DIOS (Salmo 7, 9) la hizo porque conoce la infalibilidad de la justicia del Altísimo.

Declaró este principio fundamental: “YEHOVAH DIOS es justo y me hará justicia”.

Verdad común y peligrosamente rechazada acerca de YEHOVAH DIOS. Muchos anticipan que un día estarán de pie delante de un DIOS de gran amor, gran misericordia, gran calidez y gran generosidad.

Ellos jamás se imaginan que estarán de pie delante de un “Juez”, que es perfectamente justo y que no puede ignorar el crimen del pecado.

Podemos decir que el pecado es un crimen, que quebranta la buena y santa Ley de YEHOVAH DIOS.

Mientras todos los pecados no son equitativamente pecaminosos, “unos pecados son peores que otros y recibirán mayor condenación” Mateo 23, 14-15, aún no hay pecados pequeños en contra de un gran Juez.

David aquí consideró prontitud de YEHOVAH DIOS para juzgar al pecador, vio la espada afilada y el arco tenso, como Juez supremo preparado para juzgar, el pecador jamás debe de presumir que retardará Su juicio.

Este es otro grave error hecho por muchos que ven a YEHOVAH DIOS retardando el juicio merecido debido a la misericordia y que yerran por la idea de que el Señor no está interesado en la práctica de la justicia.

Verso 12a, “atento siempre por castigar” revela que YEHOVAH DIOS estaba esperando, que el hombre opte por arrepentirse.

Esta poderosa imagen poética comunica la severidad del juicio de YEHOVAH DIOS, en su misericordia proveyó el arrepentimiento.

La ira de YEHOVAH DIOS puede ser lenta, pero siempre es segura, una seguridad desconsiderada, el hombre juguetea y desparrama el precioso tiempo, no sabe que cada transgresión le saca más filo a la espada, la cual es así afilada continuamente para su destrucción.

Verso 15

La maldad de los impíos, esta declaración muestra que el corazón impío se mostrará a sí mismo en sus obras impías cubierta de respetabilidad, no obstante, estará llena con iniquidad, como lo fue con el caso de los fariseos en los días de Yeshúa.

Lo que asevera la fuente del pecado, el pecador da a luz al pecado, así como la madre da a luz a hijos, desde dentro.

Versos del 16 al 17

YEHOVAH DIOS lidia con los impíos, nos muestra un método común de la distribución de justicia por parte de DIOS, a menudo trae la misma calamidad sobre el impío, la cual ellos han planeado para el justo.

Dos ejemplos entre muchos en la Biblia son el destino de Amán, el enemigo de Mardoqueo y los judíos enemigos de Daniel, en el pozo de los leones.

El hombre rico “Epulón”, quien malgastó tantos barriles de vino, ahora no puede procurar agua, ni una vasija, ni un puñado, ni una gota de agua, para refrescar su lengua. ¡Una recompensa justa! “Él no dio ni una migaja; él no recibirá ni una gota”.

Verso 18

La respuesta de alabanza, David fue lo suficientemente sabio para alabar a YEHOVAH DIOS de acuerdo a Su justicia y no a su propia justicia.

David terminó este Salmo, el cual comenzó en penumbra, en alabanza, podía alabar porque llevó su causa hacia YEHOVAH DIOS y en Fe la dejó allí.

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1 comentario en «Salmos Capítulo 7»

  1. Debemos conocer que Yehovah Dios en su misericordia espera el arrepentimiento del pecador el señor es un juez justo que actúa con severidad cuando obtenemos una actitud de incredulidad ante su presencia y defiende también al justo cuando asechado por el enemigo.

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