Sexta colección: “Palabras de Agur” (30, 1–33)
Versos del 1 al 9
No sabemos quién es este Agur, y menos aún su padre Yaqué, pero tenemos aquí una de las grandes preocupaciones de los representantes de la corriente sapiencial, el verdadero sabio siente cada vez más lejos la genuina sabiduría.
Sólo YEHOVHA DIOS es completamente sabio y el ser humano, por más que se esfuerce, a duras penas alcanza a ver destellos de esa gran sabiduría que se revela a la humanidad a través de Su Palabra.
Termina la plegaria con una petición que cobra gran actualidad, se trata de lo peligrosa que resulta la riqueza, ya que puede venir a reemplazar a Dios.
El capitalismo moderno en todas sus expresiones ha generado una especie de ideología que hace creer al ser humano que el único absoluto es el dinero, el tener y al servicio de este absoluto encontramos muchos “adoradores”.
La extrema pobreza también es peligrosa, por cuanto puede hacernos renegar de YEHOVAH DIOS.
Los millones y millones de hombres y mujeres que a diario van quedando despojados y hambrientos, ¿a qué Dios se dirigen? ¿Qué respuesta obtienen de Dios?.
Dios está dispuesto a responder, pero única y exclusivamente a través de quienes nos consideramos sus seguidores.
¿Qué respuesta estamos dando nosotros? ¿Qué imagen de Dios estamos mostrando a esos seres humanos que padecen hambre y miseria?.
Versos del 10 al 14
Se alude a las personas que se dedican a hacer el mal o a distorsionar de algún modo, el justo orden querido por Dios.
Estas personas están destinadas a la maldición.
Versos del 15 al 33
Una de las formas mnemotécnicas que ayudaba a retener en la mente las sentencias era el llamado “proverbio numérico”, del cual tenemos varios ejemplos en esta sección.
Usando los números dos, tres y cuatro, el sabio describe lo insondable del misterio del seol (vs 15-16), con otro proverbio numérico se alude al misterio de la procreación y de la concepción (vs 18-19).
Algunas actitudes y comportamientos humanos son enjuiciados del mismo modo, como el de la esclava que sucede a su señora, una manera de enjuiciar la inversión de algunos valores de la época (vs 21-23).
La sabiduría de la naturaleza y del mundo animal también queda retratada en otro proverbio numérico (vs 24-31).
Termina la sección con un sabio consejo, no ser engreído y buscar una vida tranquila sin discordias ni pleitos (vs 32-33).
Esta sección en su conjunto revela el horror que deben experimentar los que se apegan a la Palaba de Dios, cuando quienes gobiernan adoptan juicios fuera de la ética moral del Creador.
El repudio que muestra Agur autor de los proverbios, es contextualmente el que debería expresar toda la Iglesia Cristiana contra todos los antivalores impuestos por la sociedad, que pretenden demostrar la caducidad de la moral propia innegociable, establecida en la Palabra de YEHOVAH DIOS.
Así como el autor repudia al esclavo que se convierte en el amo, igualmente debemos repudiar la legalización del aborto, matrimonios homosexuales, admisión de juicios que los hijos interponen ante los padres, clara aprobación social del adulterio y fornicación, además de la legalización de la eutanasia y el consumo de sustancias estupefacientes, bajo la cortina de consumo medicinal.
Todas estas acciones muestran la putrefacción social de una sociedad que abandonó la sabiduría en el mismo instante en que abrazó el humanismo, ateísmo, comunismo, marxismo, capitalismo y monarquía.
En resumen, toda forma de gobierno que vino para remplazar la teocracia ha conducido al mundo a ser sojuzgado por el gobernador de las tinieblas.
Quien ama la Sabiduría guarda la moral establecida en la Ley de los Mandamientos de YEHOVAH DIOS.