Verso 1
El Señor YEHOVAH DIOS le habla a Job desde un torbellino. Durante los 35 capítulos anteriores desde Job 2, YEHOVAH DIOS ha estado directamente ausente del relato.
No leemos nada del rol directo del Altísimo en consolar, hablar o sostener a Job en medio de su crisis. Durante ese tiempo, Job clamaba repetidamente por que el gran Yo Soy le hablara.
Elihú vio la tormenta que se acercaba y habló sobre la presencia de YEHOVAH DIOS en un fenómeno tan poderoso (Job 36, 22 – 37,24).
Sin embargo, aquí escuchamos al mismo YEHOVAH DIOS hablarle a Job.
De manera significativa, YEHOVAH DIOS no respondió inmediata ni directamente a los amigos de Job, ni a los ancianos Elifaz, Bildad o Sofar, ni al amigo joven Elihú. YEHOVAH DIOS respondió sólo a Job.
Repetidamente el torbellino es asociado con la presencia divina. Nos habla de la poderosa e incontrolable naturaleza de YEHOVAH DIOS, que ÉL es como un tornado que no puede ser controlado o poseído.
· YEHOVAH DIOS se llevó a Elías al cielo en un torbellino (2 de Reyes 2, 1-11).
· La presencia de YEHOVAH DIOS está en el torbellino (Salmos 77, 18; Nahúm 1, 3).
· La venida de YEHOVAH DIOS será como un torbellino (Isaías 66, 15; Jeremías 4, 13; 23,19).
· YEHOVAH DIOS se le apareció a Ezequiel en un torbellino (Ezequiel 1, 4).
Los problemas de Job comenzaron cuando un gran viento mató a sus hijos (Job 1, 19). El Altísimo estaba en esa tormenta y ahora habla desde la tempestad.
Versos del 2 al 3
YEHOVAH DIOS llama a Job a rendir cuentas. Con justa razón podemos preguntarnos a quién le hizo YEHOVAH DIOS esta pregunta.
Podría haber sido dirigida directamente a Elihú, quien fue el orador anterior que fue interrumpido por esta Palabra del Altísimo y quien afirmaba hablar de parte de YEHOVAH DIOS (Job 36, 1-4).
Job se había quejado con anterioridad que YEHOVAH DIOS estaba luchando en su contra en una gran prueba, Job 16, 7-14 es un ejemplo.
Podríamos decir que Job, sin saberlo, en realidad estaba luchando contra Satanás. Ahora ciertamente lucharía con YEHOVAH DIOS, quien lo retó a ceñir sus lomos como varón.
Job había insistido en que YEHOVAH DIOS le diera respuestas. YEHOVAH DIOS volteó el asunto y le dijo a Job que antes de que respondiera sus preguntas, Job tenía algunas que responder delante de ÉL.
Versos del 4 al 7
“¿Conoces los secretos de la creación del mundo?” La intención de esta pregunta es evidente.
Job no se encontraba en ningún lado cuando YEHOVAH DIOS fundaba la tierra. YEHOVAH DIOS era antiguo en su poder y sabiduría, Job nunca podría ser considerado al mismo nivel de YEHOVAH DIOS.
No estuvo presente en la creación del mundo, así que no tenía conocimiento sobre las medidas o fundamentos de la tierra, en efecto tiene sus medidas y fundamentos, sin embargo, Job no las conocía.
Esto nos dice que los seres angelicales, llamados aquí las estrellas del alba y los hijos de YEHOVAH DIOS, sí fueron testigos de la creación de la tierra y se regocijaron ante la Gloria, el Poder y la Sabiduría de YEHOVAH DIOS en la creación.
Versos del 8 al 11
“¿Conoces los límites del océano?” Esta es una referencia a la obra de YEHOVAH DIOS en el segundo día de la creación (Génesis 1, 6-8).
Fue cuando YEHOVAH DIOS dividió las aguas y separó la tierra del mar. Job no se encontraba cerca cuando el Altísimo hizo esto y por lo tanto, no tenía ni idea de cómo fue hecho.
En el antiguo mundo Semítico, el control del embravecido mar era un símbolo único de poder divino y autoridad.
Job no tenía conocimiento de cómo YEHOVAH DIOS puso los límites para el mar, sabía que tales límites existían, pero no podía explicar exactamente cómo o por qué fueron puestos.
Versos del 12 al 18
“¿Comprendes la naturaleza de la tierra?”. Esta pregunta que hizo YEHOVAH DIOS era maravillosa.
“Job, ¿has hecho tú que llegue la mañana por lo menos una vez en todos los días de tu vida? ¿Es algo que puedas hacer?”.
Job probablemente ni siquiera sabía que había fuentes del mar, mucho menos como entrar a ellas. Ciertamente no conocía otras cosas ocultas, como las puertas de la muerte o los fines de la tierra.
Versos del 19 al 24
“¿Comprendes la naturaleza de la luz, la oscuridad y el cielo?” Fue como si YEHOVAH DIOS preguntara, “Job ¿sabes de donde viene la luz? ¿Conoces su naturaleza y su fuente?”.
Aquí la luz y la oscuridad son personificados y asociados como seres misteriosos cuyo lugar está fuera del alcance del hombre.
Necesitan una guía que los ayude a encontrar el camino a casa, YEHOVAH DIOS puede hacerlo, pero Job no.
Job era tan viejo y tan sabio que efectivamente sabía estas cosas. Si este fuera el caso, YEHOVAH DIOS invitaba a Job a hablar en cualquier momento.
En diferentes espectaculares ocasiones en el registro Bíblico, YEHOVAH DIOS utilizó y volverá a utilizar el granizo como bombas y misiles del cielo, contra los que son hostiles contra ÉL y su pueblo.
El granizo es frecuentemente encontrado como una herramienta de juicio contra los enemigos de DIOS, como se ve contra Egipto (Éxodo 9, 24), los Cananitas (Josué 10, 11), el apóstata Israel (Isaías 28, 2), Gog y Magog (Ezequiel 38, 22) y contra una rebelde tierra en la Gran Tribulación (Apocalipsis 16, 20-21).
YEHOVAH DIOS lo tiene almacenado en sus tesoros, el Señor piensa sobre la nieve lo que el hombre piensa sobre el oro.
Los juicios que se vienen sobre la tierra son tesoros de YEHOVAH DIOS y el deshielo polar es como un reloj de arena que anuncia que el tiempo dado para el arrepentimiento de Israel y todas las naciones se está agotando.
Versos del 25 al 30
“¿Entiendes la naturaleza de la lluvia y sus efectos?”.
En la sección anterior YEHOVAH DIOS habló de su sabiduría en el manejo y uso de la nieve y el granizo, aquí habló de su habilidad para diseñar sistemas de drenaje y el conducto al turbión, aguacero con vientos violentos.
En Job 36, 22-37, 24; Elihú utilizó el ciclo del agua como se mostraba en la tormenta que se acercaba, como un ejemplo de la grandeza de YEHOVAH DIOS.
Aquí YEHOVAH DIOS tomó crédito por saber cómo estaban diseñadas y eran mantenidas estas cosas y le preguntó a Job, si él tenía conocimiento similar.
Versos del 31 al 33
“¿Conoces la naturaleza de las constelaciones?” YEHOVAH DIOS no solo desafió a Job sobre su falta de conocimiento, también expuso su falta de poder y grandeza en comparación con el Altísimo.
Evidentemente, Job no era capaz de manejar, dominar o cambiar ninguna de las estrellas o constelaciones en el cielo, sin embargo, YEHOVAH DIOS podía.
Con estos grandes y casi extravagantes ejemplos que señalan lo que Job no sabía, debemos recordar que el propósito de YEHOVAH DIOS aquí no era humillar a Job. Más bien, aquí el punto es que ÉL es omnisciente y el hombre no.
Como muchos en el mundo antiguo, Job probablemente entendía el arreglo y los patrones en el cielo estrellado.
Sin embargo, no podía siquiera comenzar a explicar las fuerzas naturales que gobernaban este arreglo, las ordenanzas de los cielos.
Versos del 34 al 38
“¿Conoces la naturaleza de las nubes, el clima y la mente humana?”.
Job no solo no tenía autoridad sobre el cielo estrellado y las constelaciones, tampoco la tenía sobre las nubes y los relámpagos, no tenía poder sobre los fenómenos naturales, ni cerca ni lejos de él.
Sabía que el hombre tenía inteligencia y sabiduría y que esta inteligencia debió haber sido dada por un Diseñador Inteligente.
Como todos los hombres, la capacidad intelectual de Job no era el producto de la casualidad o procesos misteriosos, fue diseñada por un gran Diseñador.
Es interesante considerar que la ciencia moderna, ha hecho un progreso asombroso en responder algunas de las preguntas que YEHOVAH DIOS le hizo a Job.
· La ciencia moderna entiende mucho más sobre las medidas de la tierra (vs 5).
· La ciencia moderna entiende mucho más sobre las fuerzas gravitacionales, que mantienen a la tierra suspendida (vs 6).
· La ciencia moderna sabe mucho más sobre los sistemas meteorológicos e hidrológicos de la tierra (vs 8-11; 16, 25-30).
· La ciencia moderna sabe mucho más sobre la naturaleza de la luz (vs 19-20).
Versos del 39 al 41
“¿Entiendes y dominas el reino animal?”. En su discurso a Job, YEHOVAH DIOS se movió de la distante expansión de las constelaciones, bajó a las nubes, bajó hasta la mente humana.
Y aquí aún más hasta el simple instinto animal, como la habilidad de cazar presa para el león. Job ni siquiera podía hacer esto, por lo tanto, era presuntuoso para él demandar respuestas de YEHOVAH DIOS de la manera en que lo hizo.
YEHOVAH DIOS provee de comida para las aves (Mateo 6, 26), sería imposible para Job o para cualquier otro hombre hacerlo, aquí el Altísimo está recordándole Su distancia con Job.
La opción es de alguna manera aleatoria, como si YEHOVAH DIOS estuviera diciendo.
“Aquí hay algunos especímenes de todas mis criaturas, grandes y pequeñas, aladas y no voladoras, salvajes y domesticadas, pero todas bajo mi cuidado y dominio”.