Versos 1 al 5
En el capítulo anterior, YEHOVAH DIOS dio un mandamiento al hombre de no comer el fruto del árbol del bien mezclado con el mal, porque con ello, obtendría la muerte (separado espiritualmente de YEHOVAH DIOS), Génesis 2, 16-17.
En el presente capítulo, entra en la escena la serpiente, cuyo nombre en hebreo es “nachash” según la concordancia del hebreo Strong 5175 por su siseo es alguien que susurra, un encantador o hacedor de hechizos, es uno que adivina, que aprende por la experiencia, se dedica a estudiar tanto los movimientos que puede llegar a pronosticar, por si fuera poco, resalta por su aspecto brillante, luminoso, resplandeciente.
Ahora bien, la Palabra nos dice que era astuta, en la concordancia Strong 6175 hebreo se pronuncia “Arúm” y significa, avisado, cuerdo, perspicaz, sensato, prudente, es alguien, que medita cada uno de sus pasos, antes de darlos, se usa de forma positiva o negativa lo que viene determinado por el contexto.
Por lo consiguiente, se puede afirmar, que serpiente es un ser pensante, que tiene raciocinio y ajustado a su propósito, en su astucia, posee habilidades, que le permiten Perseverar, en diferentes planes calculados cuidadosamente para alcanzar su objetivo.
El libro de Apocalipsis, en sus capítulos 12, 9 y 20, 2, identifica a Satanás como la serpiente antigua que con astucia en iniquidad (torcer lo derecho), empleando falsos argumentos, que parecen tener mucha lógica, con el motivo de desobedecer al creador, trastornan a todo el que se prenda en sus hechizos, para colocarlo en una posición de pecado por haber sucumbido a la tentación.
Versos 6 al 13
Efectivamente, el susurro de la serpiente como arte de seducción, caló en en la mente de la mujer, hasta que se dispuso con toda su voluntad, tomar el fruto del árbol de la iniquidad, y comió también, su marido que estaba junto a ella.
Adán, en una postura pasiva, mientras la serpiente descalificaba el Mandamiento, que YEHOVAH DIOS les había instruido, falló en cultivarlo en su esposa y cuidar que lo cumpliera, por ello, amados hermanos, les afirmamos que aunque la mujer cometa infidelidad, el varón es responsable por no cumplir su función de cultivar y cuidar de la esposa, con la que fue bendecido.
En consecuencia, el Padre creador viene a la resolución de conflictos, haciendo preguntas al hombre, quien no tuvo mas respuesta que culpar al mismo Dios diciendo: “tu fuiste quien me dio a la mujer que me hizo desobedecer”, de igual forma, la mujer culpó a la serpiente.
Amados hijos, cometer pecados nos deja sin argumentos, ya que el mismo se define como “romper la ley por rebeldía” (1 Juan 3, 4), saber hacer lo bueno y no hacerlo es pecado, no existe justificación para quien conociendo la norma la viola deliberadamente.
Versos 14 al 19
En todo caso, se trata de la contaminación de la simiente, que altera en adelante la configuración genética, de toda la descendencia de la primera pareja humana, por esta causa, el corazón del hombre es irremediablemente perverso, puesto que sus sentidos quedaron bajo servidumbre a la desobediencia carnal en lo que respecta a la Ley del Altísimo.
Por ello, los descendientes deben batallar con debilidades, que no estaban impresas en su naturaleza original, incluida la muerte física, notemos que YEHOVAH DIOS ordenó la enemistad de la simiente (genética o semilla) de la mujer (xx), con la de la serpiente, pero no así la del varón (xy), lo que dejó el fundamento, para que el Salvador naciera de una mujer sin simiente contaminada, de una Virgen.
Como la mujer se dejó engañar, siguiendo la voz de la serpiente, ahora queda sujeta a esclavitud del dominio del varón, por otra parte, el varón abdicó a su posición de cabeza, siguiendo el mandato de la mujer y no la de su autoridad YEHOVAH DIOS, por lo que a partir de ese momento, ahora la naturaleza en pleno, se revela en rebeldía contra el hombre a quien anteriormente le obedecían.
Versos 20 al 24
Concretizando, la raza humana pierde su ciudadanía en el Paraíso, porque el pecado instaló de inmediato la muerte (separación espiritual), y al igual, que un mayordomo infiel, fue degradada de su posición de privilegio y echada fuera donde es el rechinar de dientes, por desoír el mandamiento del Padre Creador.
Sin embargo, hay una Buena Noticia, un acto casi desapercibido, nos muestra la existencia de un plan para el rescate inmerecido de la humanidad, puesto de manifiesto en la piel con la que YEHOVAH DIOS cubrió al hombre y la mujer, como signo, el cual indica que cumplido el tiempo estipulado, Yeshúa Ha Mashiaj expondría su vida en la Cruz, por el rescate de todos los que han creído en su Nombre.
Cómo Discípulos de Yeshua, a su semejanza, tenemos que vivir obedeciendo a los mandatos de Yehovah, más allá de los placeres de la carnes, que por ver apetitoso el fruto decidieron dejar a un lado la orden que Yehovah les había dado, trayendo la maldición a la raza humana, pero en su misericordia de Dios Yeshua nos traído la luz para escoger entre la bendición por obedecele o la maldición por ser rebeldes a los mandatos de Dios..
Deuteronomio 30,19
[19]Hoy tomo por testigos contra ustedes al cielo y a la tierra: yo he puesto delante de ti la vida y la muerte, la bendición y la maldición. Elige la vida, y vivirás, tú y tus descendientes,