Honra a tu Padre y a tu Madre. Éxodo 20, 12
I. Los hijos deben honrar a sus padres teniéndoles en alta Estima
Honra del Strong 3366 se pronuncia “Yekawr”, significa alta estima, hermoso, alto valor o riqueza, elevado precio, gran dignidad. Otra palabra para honrar es “Kabed” del Strong 3513 que significa de gran peso, gravoso, glorificar, estimado, fuerte y honorable.
En su definición más general la honra refiere la gran importancia en peso de autoridad que reviste el direccionamiento en órdenes y consejos conferidos por los padres a los hijos.
Tienen que demostrarles un respeto cortés y profundo, por eso, cuando el apóstol habla de los padres terrenales, habla también de reverenciarlos, Hebreos 12,9.
Esta reverencia ha de ser expresada:
1. Interiormente, con un temor combinado con amor
Levítico 19,3. “Respetarán a su madre y a su padre, y observarán mis sábados. Yo soy el Señor, su Dios”.
En el mandamiento, el padre es mencionado primero; aquí, la madre es mencionada primero, en parte para honrar a la madre y porque la madre interactúa más con los hijos en su infancia, por ser su fuente de nutrición.
2. Externamente con palabras y con acciones
Reverenciar a los padres con palabras, se refiere a cuando se habla directamente con ellos o cuando se habla de ellos a otros, 1 Reyes 2,20 cuando hablan de sus padres los hijos deben hablar honorablemente, es una reverencia a la Madre y al Padre, tienen que hablar bien de ellos.
Proverbios 31, 28 la estima de los hijos por los padres debe ser de tal grado que cubran sus errores o debilidades, es totalmente deshonroso los hijos perros vagabundos que se atreven en medio de una reunión levantar la voz para corregir a su Padre o Madre en público “no papá, no es así” dicen, “padre disculpe”, dicen, no tienes que dejar en pena a tu papá, te puede parecer muy bueno y justo pero no es correcto de acuerdo a la Palabra.
Génesis 9, 22-23 Vemos el ejemplo de Sem y Jasef tuvieron la delicadeza de esconder la desnudez de su padre, todo hijo debe hacer lo mismo sin importar los errores de los padres, y no tomar la actitud de deshonra que tuvo Cam.
3. La actitud de los Hijos debe ser de sumisión hacia sus Padres
José se convirtió en un gran príncipe en Egipto, mientras que su padre había empobrecido, sin embargo, le dio cobijo preferente asignándole con el favor del Faraón la mejor tierra para que pastaran sus ovejas. Independientemente de la fama y el poder obtenido, delante de su padre era hijo que servía por lo que era y no por el título que tenía, Génesis 46, 29.
Muchos se jactan de lo que han alcanzado premios, títulos y estos los han obtenido por el apoyo de los Padres, para luego echarles en cara y decirles a los Padres que son ignorantes o brutos porque ellos nunca estudiaron o no se graduaron.
Como hijos debes reconocer que delante de los padres los títulos no son nada, primero es amar la Palabra de Yehovah y su cumplimiento que te indica que debes honrarlos y respetarlos.
El rey Salomón, cuando su madre se acercó a él en 1 Reyes 2,19, vemos su reverencia y esto parece una historia de fantasía pasada de moda en el contexto de la familia actual, ¿Dónde está la reverencia consciente que los hijos deben tener hacia sus Padres?
No viniste de la nada debes honrar a Yehovah a través de la honra a tus padres, hoy los hijos piensan que dedicar tiempo a los Padres significa perderlo, es aburrimiento, los tratan con desprecio, no tienen paciencia con ellos y se comportan con tanto orgullo e indiferencia hacia ellos, que son una vergüenza para el evangelio, porque no son testigos y testimonios del amor en que Yehovah nos dice que debemos vivir y causan que sus padres vayan al sepulcro con dolor y después ya no puedes hacer nada.
Deuteronomio 27,16 si todos los que deshonran a sus Padres son malditos, ¿Cuántos hijos en nuestra época se encuentran bajo esa maldición?
Si los que son irrespetuosos con sus padres viven hasta tener hijos, sus propios hijos serán una espina en su carne y Yehovah les recordará sus pecados en el día de su castigo.
II. Los hijos deben Honrar a los Padres siendo cuidadosamente Obedientes
Colosenses 3,20 El Señor Jesús fue un ejemplo en esto para los hijos, se sujetó a sus padres Lucas 2,51 a Yeshúa a quien se le sujetaban los ángeles, se sujetaba a sus padres.
La palabra Obedecer en Lucas 2,51 viene del griego “Jupakoúoy” quiere decir literalmente “oír desde abajo”, como subordinado, conformarse a comando o autoridad, lo mismo que significa en el hebreo “Shemá” que es “oír para hacer lo que ordena la cabeza”.
A Yeshúa le fue conferida toda autoridad sobre todo principados en los cielos y, sin embargo, era totalmente obediente a sus Padres terrenales, incluso, siguió honrando a María en medio de su vida pública.
La obediencia a los padres se pone en manifiesto en por lo menos tres acciones distintas:
1. Siguiendo sus Consejos
Proverbios 1,8 los padres ocupan el lugar de Yehovah, para que te puedan enseñar el temor del Señor, tienes que atender sus palabras como si fueran mandamientos y no ser como una víbora sorda, tapándose los oídos.
Los hijos de Elí no siguieron los consejos de su padre y fueron llamados “impíos”, 1 Samuel 2, 12. 25.
Los hijos deben seguir los consejos de sus padres en cuestiones espirituales, de igual modo lo harán en todos los asuntos que se refieren a la toma de decisiones en su vida, como la elección de su vocación universitaria e involucrarse en el proceso de elección del esposo (a).
Jacob no se iba a casar, aunque ya tenía cuarenta años, sin la aprobación de sus Padres, lo vemos en Génesis 27, 46 – 28, 3.
Los hijos deben “casarse en el Señor” y esto es entre verdaderos Adoradores en Espíritu y Verdad de Yehovah de los Ejércitos, por lo tanto, es inaceptable contraer nupcias en yugo desigual de Fe porque ¿Qué comunión tiene un águila con una culebra, en qué momento se cruzan en el camino?
En 1 Corintios 7, 39 el apóstol Pablo le está exigiendo a las viudas que si toman nuevas nupcias tomen la decisión correcta, decidir por hombres temerosos de la Palabra de Yehovah, porque se supone, que esta elección para los hijos solteros la hacen los Padres, entonces, a la viuda, la mujer divorciada y a la mujer no virgen le toca a ella misma tomar la decisión porque ya no están bajo el yugo paternal.
2. Cumpliendo sus Órdenes
El hijo debe ser el eco de los padres, cuando el padre habla, el hijo debe ser su eco obedeciendo.
Se debe tomar en cuenta que cuando eran las campañas militares en la época medieval, no había megáfono, el comandante hablaba y le seguía el cabo repitiendo en función de la copia del líder hasta llegar al destino final y ejecutarse con éxito su propósito, tal cual como lo había ordenado el primero que ejecutó la orden.
En la Palabra tenemos ejemplo de ser eco de la palabra de los Padres, el padre de los recabitas les prohibió beber vino a sus hijos, le obedecieron y fueron felicitados por ello, esta cita la encontramos en Jeremías 35, 14-19.
Vemos que las doce (12) tribus eran desobedientes pero estos recabitas eran de una tribu formada de los descendientes de Jetro, el suegro de Moisés, unos que no eran parte de la promesa y eran más obedientes que los miembros de las mismas tribus de Yehovah.
Para ahondar más sobre este punto pueden hacer un estudio sobre Yoyadá en Jueces 1, 16; 4, 17; 1 Samuel 15,6; 1 Crónicas 2, 55; 1 Reyes 10, 15-18, se los dejamos allí para los estudiosos de la Palabra de Yehovah.
La Palabra de Yehovah nos presenta a Esaú obedeciendo a su Padre cuando le ordenó que le trajera carne de venado, porque probablemente le gustaba cazar, pero también cuando se negó a obedecerle en una cuestión más importante y decisión trascendental para su vida en cuanto a la elección de una esposa, Genesis 28, 6-9.
Esaú le obedeció en lo que le gustaba hacer, “esa obediencia no sirve”, porque es complaciendo su carne y no obedeciendo al Padre de acuerdo al mandato divino, aunque los hijos tienen que obedecer a sus padres “en todo”, no obstante, “es dentro de la limitación de cosas justas y honestas apegadas a la Palabra de Yehovah”.
“Obedeced en el Señor”, es decir, siempre que las órdenes de los Padres coincidan con las órdenes de Yehovah, Efesios 6,1-3 si ordenan algo que es “contrario a Yehovah”, pierden su derecho a ser obedecidos, porque tienen que poner a Yehovah en primer lugar.
3. Satisfaciendo sus Necesidades
Los hijos están en la obligación de socorrer a sus padres en sus necesidades, en la Palabra tenemos el ejemplo de José que se ocupó de suplir las necesidades de su padre en su vejez, Génesis 47,12.
Se trata de pagar una deuda justa, los hijos o monstruos debiera llamarlos, son ellos mismos una vergüenza cuando se avergüenzan de sus Padres cuando envejecen y decaen, y les dan una piedra cuando piden pan.
Cuando las casas se ven cerradas, decimos que allí está la plaga, cuando el corazón de los hijos se cierra contra sus Padres, tienen la plaga, debemos seguir a quien es el camino, verdad y vida, nuestro bendito Salvador cuidó mucho a su madre.
Observamos que, en su agonía en la cruz, encargó a su discípulo Juan que la llevara a su casa con él como si fuera su madre y se ocupará que no le faltara nada, Juan 19, 26-27.
Yeshúa lo explica muy bien cuando habla sobre el mandato de Yehovah y lo que son enseñanzas de los hombres en Mateo 15, 3-6, cuando se refiere a deberes es tipificado como honra, el honrar implica servir al Padre o Madre, cuando vives con ellos en obedecer su palabra y cuando estas fuera de casa en sustentarlos, Yeshúa dice maldito el que niegue recursos a sus Padres por ocasión de tenerle en baja estima.
III. ¿Por qué creen que la edad promedio en que la gente muere, está entre los 60 y 70 años?
La respuesta la tenemos en Malaquías 3,23-24 es por la inmensa maldición de la honra por la que sus hijos no dan a sus padres, el espíritu de Elías en Juan Bautista es uno que dice “obedezcan los mandamientos de Yehovah, vuelvan a la Torá, que cada hijo obedezca a su Padre”.
Confirmado en Isaías 65, 19-20 esta cita reafirma que Yehovah no miente y todo el que muere antes de los cien (100) años ha cometido deshonra contra sus padres.
Volvamos a Efesios 6,1-3, vemos que la larga vida se obtiene como bendición, la corta vida es una maldición, “Honra a tu Padre para que tus días se alarguen”.
Nada acorta la vida más pronto que la desobediencia a los padres, Absalón fue un hijo desobediente que quiso quitarle la vida y la corona a su padre en 2 Samuel 15, 10-18 y a pesar del deseo de su Padre por sentimiento carnal de respetarle la vida en 2 Samuel 18, 5 Yehovah hace justicia, porque su palabra de se cumple 2 Samuel 18, 7-18.
Se confirma que la obediencia a los padres va desenrollando la vida, no sólo alarga la vida, sino que la hace más justa y llena de paz porque se cumple la Palabra de Yehovah en nuestras vidas.
Vivir una larga vida y no poseer nada de bienes es una miseria, pero la obediencia a los Padres asegura la herencia de tierras para el hijo.
Génesis 27, 38-40 Yehovah tiene más que una bendición para el hijo obediente, no sólo gozará de larga vida, sino de una tierra que da fruto y no sólo tendrá tierras, sino que ellas le serán dadas con amor: “la tierra que Yehovah tu Dios te da”.
Disfrutarás de tierras no sólo por el favor de Yehovah, sino por su amor, todos estos son argumentos poderosos para hacer que los “Hijos Honren y Obedezcan a sus Padres”.
Ya lo explica Deuteronomio 28, 1. 8-14 la Bendición por Obediencia y en Deuteronomio 28, 15-28 Maldición por desobediencia.
IV. Consejos para poner en Práctica
Proverbios 1, 8-19 el hijo debe evitar las malas compañías que acechan su propia vida y traban contra sí mismos.
Proverbios 13, 1 debes ser un hijo sabio atento a la voz de tu autoridad, quien es tu fuente legal.
Proverbios 19, 26 Como hijo Doulos (esclavo por amor) debes velar por ganar la estima y amor de tus padres honrándolos, el que los honra también es honrado por Yehovah
Proverbios 23, 22 Pon atención a la sabia instrucción de tus padres para que vivas largamente.
Deuteronomio 21, 18 Cuando los hijos no caminan en la voluntad de los padres poseen un espíritu contrario, es decir, van en la dirección contraria, son el diablo, porque este término significa el que se opone.
A Yehovah le agrada que los hijos caminen en sintonía con la Obediencia, cuando Saul y David fueron escogidos por Yehovah fue porque estaban haciendo la voluntad de sus padres, aún más agrega con respecto a David, que es conforme a su corazón, es decir, a su espíritu, es uno que en voluntaria sumisión hará todo lo que el padre le indique, 1 Samuel 9, 1-10.15-16; 10, 1ab; 16, 1.6-13.
Es decir, amados hijos la obediencia es el criterio fundamental para la promoción que sus Padres deben evaluar como elemento indispensable a la hora de heredar. Solo el de arriba promociona.
V. Ejemplo del hijo Pródigo
Lucas 15, 11-32.
Los personajes son el Padre, el hijo menor y el hijo mayor, el Padre representa a Yehovah Dios generoso y misericordioso, el hijo menor pide su herencia (Vs 12) y el Padre reparte sus bienes a los dos (Vs 13), al hijo menor apartarse del Padre queda fuera de su cobertura (está Muerto, separado de).
Por vivir para los placeres del mundo, carne y demonio pierde todo primero había perdido la cobertura espiritual que se traduce en la perdida de sus bienes físicos, en el Vs 17 se observa que recapacitó hizo “teshuvá” arrepentimiento volviendo a la casa de su Padre en quien tiene cobertura espiritual, para su alma y física.
El Padre lo viste, le coloca anillo y calzado cuando el hijo menor reconoce que ha pecado contra Yehovah y contra su Padre Vs 21 y 22, para volver a la voluntad del Padre tuvo que rechazar el mundo, la carne y el demonio donde estaba.
Romanos 13, 1-5 Si Yehovah establece que debemos obedecer a un dirigente que está en cargo público y no conocemos, cuánto más debemos obedecer y estar sujetos a nuestros padres terrenales y espirituales.