Versos del 1 al 23
El manantial del Templo. Las anteriores disposiciones referentes al Lugar Sagrado del Templo, las personas sagradas sacerdotes y levitas y al príncipe sirven como marco para introducir este nuevo elemento de la visión de Ezequiel.
El río de vida que brota desde el costado oriental del Templo y que se va extendiendo fecundando todo el territorio, incluso el Mar Muerto.
Es como si la maldición y la desgracia que han pesado sobre Israel y su territorio comenzaran a desaparecer al paso del agua vivificante y purificadora, que brota desde el Nuevo Templo habitado por la Gloria de YEHOVAH DIOS.
Siglos después, esta misma imagen será utilizada por el autor del Apocalipsis (Apocalipsis 22, 1-2).
El territorio fecundado y fertilizado idealmente por el manantial que brota del Templo, es repartido también ideal y equitativamente entre las doce tribus de Israel (Ezequiel 47, 13–48, 29).
Siete habitarán al norte del Templo y cinco habitarán al sur, cada tribu recibirá una franja de tierra que va desde el Mediterráneo hasta la frontera oriental del país.