Versos 1 al 5
El profeta presenta un oráculo dirigido exclusivamente a las mujeres de Samaría (vs 1-5), amigas del lujo y del buen vivir a costa del empobrecimiento del pueblo.
La imagen usada por Amós no puede ser más descriptiva, esas mujeres engalanadas y dedicadas al consumismo son para el profeta como las vacas de Basán.
Territorio especialmente rico en ganado vacuno, cuyos ejemplares eran famosos por su robustez (Deuteronomio 32, 14; Salmo 22,13; Ezequiel 39, 18).
¡Claro que, al menos, aquellos animales aportaban algo en contraprestación a lo que consumían!
Estas mujeres recibirán también su propio castigo, serán desterradas de su suelo, una tras otra, al estilo de deportación asirio.
Versos del 6 al 13
Escarmientos vanos. Los versículos 4-5 son una invitación llena de sarcasmo para que Israel siga empantanándose cada vez más en lo referente al verdadero culto.
Para el profeta está claro que el culto de Israel dista mucho de expresar una adhesión obediente al YEHOVAH que un día le dio la libertad y le otorgó la vida.
Ingenuamente, Israel cree que puede mantenerse en la injusticia (vs 1-3) y luego “comprarse” a YEHOVAH con sus sacrificios, diezmos y ofrendas (Miqueas 6, 6-8).
Los versos 6 al 12 recuerdan cinco plagas sucesivas, algunas quizá históricas en el pasado de Israel que hubieran servido hasta al más obstinado para reconocerlas como castigo divino y haberse convertido.
Para el profeta fueron signos de YEHOVAH, llamados a la conversión, pero Israel no se dio por enterado, no se convirtió a YEHOVAH (vs 6. 8. 9. 10. 11).
Por tanto, ya no habrá más avisos ni señales, Israel debe prepararse para enfrentarse al Altísimo (vs 12).
Lamentación por Israel. Esta lamentación no es porque haya sido destruido Israel, sino porque en el horizonte profético se alcanzan a divisarción anticipa, si no la muerte física, sí un cambio fatal en el destino de la nación.
Esta lamentación se va alternando con mensajes de invitación a la conversión y con tres duros “ayes” que presagian el duro golpe que recibirá el obstinado Israel.