Versos del 1 al 6
En estos versos Sofar le dice a Job que en realidad se merece algo mucho peor por parte de DIOS.
Este amigo de Job es el que menos habla de todos, solo aquí y en Job 20, pero tal vez es el que le habla a Job de manera más arrogante y confrontadora.
Sofar era un hombre severo. Como Bildad, carecía de compasión y era despiadadamente moralista.
Tuvo suficiente de las protestas de inocencia de Job. En su mente, toda la elocuente queja de Job le demostró que éste no era nada más que un hombre que habla mucho, uno que no debía ser justificado.
Por lo tanto, Sofar continuará con una reprensión para Job “¿Harás escarnio y no habrá quien te avergüence?”.
Sofar no representó con veracidad las palabras de Job aquí. Job no afirmaba ser puro y limpio, como si no tuviera pecado y fuera perfecto.
Pero en defensa de Sofar, debemos decir que Job afirmó estar en lo correcto y esto era prácticamente una afirmación de ser puro y limpio en este asunto.
Job sabía que no había ningún pecado especial o específico de su parte detrás de la pérdida de sus hijos, criados y riqueza material (Job 7, 20).
Aun así, Job sabía que era un pecador en general y no podía ser considerado justo comparado con YEHOVAH DIOS.
· “Por eso mis palabras han sido precipitadas” (Job 6, 3).
· “¿Y por qué no quitas mi rebelión, y perdonas mi iniquidad?” (Job 7, 21).
· “¿Y cómo se justificará el hombre con YEHOVAH DIOS?” (Job 9, 2).
· “Si yo me justificare, me condenaría mi boca; Si me dijere perfecto, esto me haría inicuo” (Job 9, 20)
· “Sé que no me tendrás por inocente” (Job 9, 28)
En el pensamiento de Sofar, no solo Job estaba equivocado al afirmar que era puro o limpio, sino que en realidad era tan culpable delante de YEHOVAH DIOS que se merecía algo mucho peor de lo que había sufrido.
Versos del 7 al 12
En estos versos Sofar enseña teología a Job, después de instruirlo en la doctrina de la depravación total, continuó enseñando a Job sobre la trascendencia de YEHOVAH DIOS.
Por lo tanto, en el pensamiento de Sofar, Job estaba mal al cuestionar a YEHOVAH DIOS.
La siguiente lección en la teología de Sofar era la soberanía de YEHOVAH DIOS, creía que lo mejor que Job podía hacer era aceptar el castigo del altísimo en vez de protestar la injusticia de este.
En la mente de Sofar, el castigo de Job era justo y en realidad YEHOVAH DIOS le estaba dando menos de lo que merecía
Aquí insinuaba que lo que Job quería era que YEHOVAH DIOS desviara su mirada de la justicia.
Quería que Job supiera que eso estaba mal y era perverso, desear que YEHOVAH DIOS no haga caso al engaño y la perversidad del hombre, en este caso, el engaño y la perversidad de Job.
Aquí, Sofar simplemente llamó a Job estúpido, lo asoció con el hombre vano, quien será sabio en cuando un pollino de asno montés comience a dar a luz seres humanos.
Versos del 13 al 19
Sofar llama a Job al arrepentimiento en estos versos, dado el entendimiento teológico sobre la situación de Job, la respuesta era sencilla.
Job simplemente debía arrepentirse y buscar la misericordia y la bondad de YEHOVAH DIOS.
Esto es lo que Job anhelaba, ser restaurado y bendecido una vez más y olvidar que todo esto le sucedió. Sofar le dijo, falsamente, que esta podía ser la porción de Job si tan solo se arrepintiera de los grandes pecados que le trajeron este desastre sobre él.
Sofar alentaba a Job a confesar y arrepentirse de su pecado mostrándole cómo YEHOVAH DIOS lo bendeciría y lo honraría, restaurándolo a una vida brillante, confiada y admirada una vez más.
Verso 20
Sofar advierte y reprende a Job, lo alentaba a confesar y arrepentirse advirtiéndole de las consecuencias si no lo hacía. Ciertamente, no escaparía de una muestra mayor de la desaprobación de YEHOVAH DIOS.
Por ello, Sofar reprendió a Job por su anterior preferencia frustrada por la muerte en vez de su presente estado miserable (Job 3, 16-17; 6, 8-9).
Él asoció a Job con los malos cuyos ojos se consumirán y que no tendrán refugio.
Hay mucho que admirar en la teología y filosofía de Sofar y los amigos de Job. Dicen mucho que es verdadero y valioso, y es, respaldado por la sabiduría de los antiguos, creían en el poder de YEHOVAH DIOS y en su justicia absoluta.
También creían que YEHOVAH DIOS perdonaría a un pecador y lo regresaría a su favor si el pecador respondiera correctamente al castigo señalado por el Altísimo.
Ellos aplicaron mal la más preciosa verdad y la más edificante de las doctrinas, convirtieron comida sana en veneno, presionaron sobre su amigo esas verdades a medias, las cuales algunas veces son las peores de las verdades.