Jueces Capítulo 17

Versos del 1 al 2

Jueces 17 y 18 presenta un ejemplo detallado de la confusión espiritual y el pecado en Israel durante los días de los Jueces. Estos dos capítulos muestran lo mal que estaban las cosas.

Micá, de la tribu de Efraín, robó 1.100 (mil cien) ciclos de plata de su madre y luego se los regresó. Su madre bendijo a su hijo por regresar el dinero, aún cuando él lo tomó originalmente.

Este hecho revela mucho sobre el carácter de Micá, su madre y el estado espiritual general de Israel durante este periodo.

Vs 10 indica que diez (10) ciclos al año era una paga adecuada. Por lo tanto, 1.100 (mil cien) ciclos era una gran fortuna.

Versos del 3 al 4

Algunos creen que esto era una imagen de un dios falso, como Baal o Astarot. Otros creen que era una imagen que representaba a YEHOVAH DIOS.

De cualquier manera, YEHOVAH DIOS prohíbe estrictamente tales imágenes, aún cuando su significado fuera el de representar o no al verdadero YEHOVAH DIOS.

El becerro de oro que Aarón hizo, era en realidad para representar a YEHOVAH DIOS (Éxodo 32, 4-5).

Pero esto violaba el segundo mandamiento “No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. No te inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy YEHOVAH tu DIOS, fuerte, celoso” (Éxodo 20, 4-5).

Debido a su naturaleza caída, el hombre quiere hacer a YEHOVAH DIOS a su imagen.

Muchas personas religiosas tallan sus propios conceptos de YEHOVAH DIOS y asumen que este es el YEHOVAH DIOS de la Biblia.

El sentido de este pasaje es que Micá hizo todo esto fácilmente. No fue difícil el tener un ídolo hecho en Israel en aquel tiempo, muestra como la sociedad de Israel estaba inclinada hacia la idolatría.

Verso 5

Micá primero prepara una casa de dioses, parecido a un pequeño templo, un lugar donde otros venían a adorar estos ídolos.

Micá imitó la adoración en el verdadero Tabernáculo de YEHOVAH DIOS, al hacer un efod. Esta era una prenda específica usada por los sacerdotes de Israel.

Además de este primer ídolo, Micá también hizo terafines, se traduce también a ídolos domésticos, ídolos que eran adorados con la esperanza de obtener prosperidad y dirección.

Finalmente, Micá estableció un orden de sacerdocio entre sus hijos. En cada uno de estos, Micá hizo todo lo que pudo para establecer una religión rival en Israel.

Todo esto provino de Micá y no de YEHOVAH DIOS, lo que era completamente una religión hecha por el hombre y centrada en el hombre.

Por lo tanto, el propósito de la casa de dioses, el hermoso efod, los ídolos atractivos y el sacerdocio establecido era para servir y agradar al hombre, no a YEHOVAH DIOS.

Este patrón de una religión agradable al hombre, continúa en ser común con muchas religiones e instituciones religiosas hoy en día.

Verso 6

Había, de hecho, un rey en Israel. Israel debió de reconocer a YEHOVAH DIOS como su Rey.

Pero ya que Israel había rechazado a YEHOVAH DIOS como Rey, estaban sin un buen y efectivo liderazgo.

Esto se refiere al individualismo radical que marcó el tiempo de los Jueces. Las personas buscaban en ellas mismas, la guía de la moralidad y la ética.

El pueblo genuinamente sentía que hacían lo que estaba bien, pero lo medían únicamente por lo que les parecía.

Esto se parece mucho a la forma de pensar moderna de “sigue tu corazón” o “deja que tu corazón te guíe”.

Las culturas modernas tienen esto como el estado ideal de la sociedad. Pero la Biblia y el sentido común nos dice, que este tipo de anarquía moral, espiritual y social no trae nada sino destrucción.

1. Parecía bien a los ojos de Adán y Eva el comer del fruto prohibido, pero YEHOVAH DIOS dijo que estaba mal.

2. Parecía bien a los ojos de los hijos de Jacob el vender a José a la esclavitud, pero YEHOVAH DIOS dijo que estaba mal.

3. Parecía bien a los ojos de Nadab y Abihu el ofrecer fuego extraño a YEHOVAH DIOS, pero YEHOVAH DIOS dijo que estaba mal.

4. Parecía bien a los ojos del rey David el cometer adulterio con Betsabé y el cubrirlo con asesinato, pero YEHOVAH DIOS dijo que estaba mal.

5. Parecía bien a los ojos de Judas el traicionar a Yeshúa Ha Mashiaj, pero YEHOVAH DIOS dijo que estaba mal.

“Hay camino que al hombre le parece derecho; Pero su fin es camino de muerte” (Proverbios 14,12).

Cuando el hombre sigue sus propios instintos, apartado de la naturaleza redimida de la persona convertida, esto conduce a la ruina.

Necesitamos seguir el camino de YEHOVAH DIOS, no el nuestro.

Versos del 7 al 8

Este hombre, siendo un levita, tenía ciudades en las cuales podía habitar y un lugar establecido por YEHOVAH DIOS para que él ministrara.

Pero él quiso hacer lo que mejor le parecía y fue ofreciéndose como sacerdote para ser contratado, para ir a vivir donde pudiera encontrar lugar.

Esto explica cómo este Levita en particular y Micá, previamente mencionado, se cruzaron en sus caminos.

Versos del 9 al 11

Micá quería que este Levita se quedara con él y que trabajara como sacerdote para él.

Él hizo esto, porque él quería legitimar su casa de dioses personal al tener un sacerdote reconocido oficialmente el cual serviría allí.

Muy en el fondo él sabía que su idolatría era falsa, sin sentido y esperaba que esto lo hicriera legítimo.

Los hombres imploran por un sacerdote.“Se mi sacerdote, di por mi parte a YEHOVAH DIOS lo que yo no puedo decir”.

Los sacrificios ofrecidos por tus manos, son más probables que sean de provecho con YEHOVAH DIOS que aquellos dados por las mías.

Así que, por diez (10) siclo y vestidos, el Levita se contrató hacia la idolatría de Micá.

El Levita fue un ejemplo perfecto de un mercenario, alguien que servía a YEHOVAH DIOS o un ídolo, por lo que le podía dar, en lugar de servir para glorificar al Altísimo.

Hay diferentes maneras en la que los mercenarios obtienen lo que quieren.

El pago de dinero para el mercenario es obvio, pero también hay mercenarios emocionales, que se meten en el ministerio debido a sus inseguridades y su necesidad de aprobación.

Los arreglos parecieron perfectos para todos y Micá se sintió como si se hubiera ganado un hijo.

Micá estaba intentando mantener su relación con YEHOVAH DIOS, a través de traspasar los mandamientos de YEHOVAH DIOS.

El Levita se degeneró, en un intento de asegurar su propio confort material al comprometerse.

Versos del 12 al 13

La consagración de Micá no significaba nada.

Él no tenía autoridad por parte de YEHOVAH DIOS para declarar a un Levita renegado como apartado, consagrado por YEHOVAH DIOS para el servicio de la casa de los dioses.

En este hecho trágico, cada persona es culpable de un terrible pecado.

Pero podríamos decir que el Levita era más culpable que Micá, porque el Levita al menos, debía conocer la Palabra de YEHOVAH DIOS.

La confianza de Micá era tan falsa como lo fue su consagración. Ambas estaban basadas en la superstición, no en la Palabra de YEHOVAH DIOS.

Micá era muy sincero, pero estaba totalmente equivocado. Sinceridad es buena, pero no te lleva a ningún lado si no está acoplada con la verdad.

Una persona que sinceramente piensa, que puede nadar a través del Océano Pacífico se ahogará, así como la persona que no es tan sincera.