Versos del 1 al 5
Después de escuchar de la conquista total de Israel sobre el Sur, los reyes del Norte se juntaron para derrotar a Israel.
El enorme ejército junto, refleja una actitud de que creían que debían detener a Israel ahora o nunca.
Todo esto es motivado por lo que los reyes del Norte oyeron acerca del éxito de Israel y su Victoria.
Caminar en Victoria significa que nos convertimos en blancos cuando revivimos, también lo hace el diablo.
Dos cosas indican que Israel ahora está enfrentando desafíos, que nunca antes había enfrentado.
Primero, el tamaño del ejército, mucha gente, como la arena que está a la orilla del mar en multitud.
Segundo, la superioridad tecnológica de los cananeos, con muchísimos caballos y carros de guerra.
Los retadores traídos a Israel parecen incrementar con cada paso, de Jericó a Aí, a la batalla con los reyes del Sur y ahora a esta batalla.
Seguido encontramos, los retos que nos enfrentan en nuestra vida cristiana, incrementan a cada paso.
YEHOVAH DIOS usa cada victoria previa, como un trampolín para lo que enfrentamos en el futuro.
Verso 6
Este ataque era nuevo y más severo que los desafíos previos.
Josué necesitaba una confirmación fresca de la promesa de YEHOVAH DIOS para su vida y ÉL fue fiel para traerla.
Esto significa que el temor era un problema para Josué y para el pueblo de Israel.
YEHOVAH DIOS tiene una razón para todo lo que hace y ÉL no les habría dicho no teman, a menos que hubiera una razón para animarlos.
Versos del 7 al 9
Josué peleó con “Valentía y Estrategia”, los sorprendió con una emboscada sorpresa.
Josué peleó con “Obediencia”, haciendo exactamente lo que YEHOVAH DIOS les dijo que hicieran, incluso destruir las “armas” cananeas, los caballos y los carros de guerra, en lugar de tomarlos para su propio ejército.
Aquí hay una lección en el tema de “tomar las armas del diablo”.
Muchos cristianos no dudan en usar “los caballos y los carros de guerra” de su enemigo espiritual.
Tal vez, deberían creer que YEHOVAH DIOS puede quererlos para pelear la batalla a un nivel diferente, un nivel de completa confianza en ÉL.
Josué peleó con Pasión y Compromiso, no dejó hasta que terminó todo lo que pudo, hiriéndolos hasta que no les dejaron ninguno.
Versos del 10 al 15
La integridad impactante de la destrucción, especialmente en términos humanos, nos muestra la integridad del juicio de YEHOVAH DIOS, la obediencia de Israel y la depravación de los cananeos.
Versos del 16 al 20
Se nos dice en parte, este juicio sobre los cananeos fue cumplido, cuando YEHOVAH DIOS endurecía el corazón de ellos contra Israel.
El endurecimiento de los corazones de los hombres, es cuando YEHOVAH DIOS rinde al hombre al pecado que está en su corazón (Romanos 1, 24-28).
No necesitamos pensar, que YEHOVAH DIOS repartió algún juicio particular sobre los cananeos.
ÉL trató con sus corazones, en la misma manera en que trata con los corazones de los hombres, pero la gracia de YEHOVAH DIOS endurece o ablanda el corazón.
Versos del 21 al 22
Esto era un temor de los anaquim, esta tribu excepcionalmente grande y de gente fuerte que atemorizó mucho a Israel para entrar a la tierra hace algunos cuarenta (40) años (Números 13, 27-33).
Ninguno de los anaquim quedó en la tierra de los hijos de Israel, aquí, los enemigos de hace cuarenta (40) años caen. No eran rivales para un ejército que estaba bendito y dirigido por YEHOVAH DIOS.
Cabe destacar, que Israel se enfrentó a los anaquim al último, solo después de que YEHOVAH DIOS los había entrenado en batalla y en trabajar con ÉL a través de meses de conquista.
Cuando Israel se rehusó a entrar a Canaán, por temor a los hijos de Anab, ellos no se dieron cuenta que YEHOVAH DIOS iba a manejar sus asuntos, para que pudieran enfrentar a su desafío más difícil, de último.
YEHOVAH DIOS sabe cómo manejar las Batallas de tu vida y nosotros debemos permitir que ÉL maneje esas batallas.
Con mucha frecuencia estamos convencidos que debemos salir y pelear a los anaquim primero, cuando YEHOVAH DIOS quiere que los enfrentemos de último.
Solamente quedaron en Gaza en Gat y en Azoto, los anaquim permanecieron sólo en las ciudades costeras ocupadas por los filisteos.
El gigante Goliat viene de la ciudad de Gat, algunos quinientos años después (1 Samuel 17, 4).
Verso 23
Esto nos lleva a otra sección del libro de Josué. El poder de los reyes cananeos dentro de la tierra ha sido destruido y en este sentido, Josué tomó toda la tierra.
Aunque, no todo pueblo pequeño o villa ha sido conquistado y ocupado. Eso quedó para que cada tribu individualmente lo hiciera, en la tierra que le fue repartida.
El fin de esta fase de conquista fue una invitación más grande, a la cooperación de las tribus con YEHOVAH DIOS.
Mucho territorio aún había sido poseído, pero se dejó a cada tribu que poseyera lo que posiblemente había recibido, a través de la conquista de todo el pueblo en la que había participado.
Cada tribu, debía aplicar las lecciones que había aprendido en la guerra unida, si quería poseer su herencia.
Que las tribus fallaron al hacerlo no era un reflejo del poder de YEHOVAH DIOS, sino del hecho de no tomar para sí, lo que Josué había dado y repartido a cada uno de ellos.
En este mismo sentido, Yeshúa Ha Mashiaj ya ha derrotado al enemigo y conquistado la tierra, pero Él también nos llama a la batalla para ganar lo que es nuestro.