Versos del 1 al 9
Esta ofrenda es llamada “terumá”, no es fácil traducir, significa “donación”, “don”, “dádiva”, “presente”, “regalo”, “contribución”, “aporte”, “tributo”, “ofrenda”.
Viene de la raíz “rum” que significa “alzar”, “elevar”. Tiene que ver con algo que se levante para separar del resto. Se puede entender, como una porción separada que se “eleva” como ofrenda para un uso Sagrado.
Literalmente, cuyo corazón generoso sugiera ofrecérmelo es “cuyo corazón lo impele”.
YEHOVAH DIOS deseaba recibir sólo aquellas dádivas que procedieran del corazón, no meramente las que provinieran de la mano o del bolsillo. Sólo aceptaría las que fuesen dadas libre y voluntariamente (2 Corintios 9, 6-7).
Solo aquel que da de corazón, tendrá el nombre inscrito en el registro de YEHOVAH DIOS, porque es el único que da con el espíritu de la iglesia de Macedonia (2 Corintios 8, 1-5).
Por lo que leemos en Éxodo 35, 21-29 y 36, 3-7, es evidente que el pueblo respondió de esta manera. Tan generosa y abundante que “se le impidió al pueblo ofrecer más”.
Los diezmos son una obligación, pero las ofrendas son voluntarias (excepto las prescritas para las Fiestas de YEHOVAH DIOS).
Por esto, sólo los que tienen un corazón alegre pueden dar a esta obra de la construcción del Tabernáculo.
De esta manera, el Tabernáculo es una extensión de los corazones del pueblo, donde YEHOVAH DIOS desea morar, como está escrito en 2 Corintios 9,7.
Lo primero que pide YEHOVAH DIOS es oro, lo más precioso. Según Génesis 2, 12 el oro es bueno, La Torá está diciendo que el oro es bueno, así que tiene valor, porque la Torá le da valor.
Ahora, los corazones voluntarios tienen la oportunidad de entregar lo más precioso a YEHOVAH DIOS.
Esta es la razón, por la que los hijos de Israel tuvieron que pedir los tesoros de Egipto antes de salir, porque sus riquezas eran necesarias para construir esta obra del Santuario.
En el Vs 5 pieles de carnero o cabra en el original “tejón” parece proceder de un término hebreo usado para referirse a una clase de pieles de animales que no se especifican.
Se sostiene, que la misma palabra está emparentado con un término arábigo, usado para referirse a la foca, en especial al dugongo o vaca marina.
La madera de acacia, es una madera dura, de veta fina, muy durable y por lo tanto, muy adecuada para ebanistería.
En los capítulos anteriores hemos visto como se ha establecido un Pacto Matrimonial entre la Palabra de YEHOVAH DIOS e Israel.
Después del primer paso, el desposorio, llega el tiempo de preparar una casa para el nuevo matrimonio.
Es la razón por la cual ahora YEHOVAH DIOS pide una casa para poder vivir junto con su esposa (Vs 8).
Versos del 10 al 11
El Arca es el objeto más íntimo del Tabernáculo en hebreo “Miskhán”, YEHOVAH DIOS siempre empieza su obra desde dentro para fuera, el hombre mira desde fuera hacia dentro.
Cuando YEHOVAH DIOS trata con un hombre, lo hace desde dentro hacia fuera. El problema de muchos es que intentan quitarse los malos frutos, las malas obras de su vida, pero no tratan con la raíz que es la causa que produce esos malos frutos.
Podemos estar toda la vida intentando mejorar nuestras acciones y nuestras palabras, pero no vamos a tener éxito al menos que vayamos al corazón, que es la causa de todas las malas obras, como está escrito en Marcos 7, 21-22.
La madera simboliza al hombre, según Salmo 1, 1-3; 92, 12-14; Jeremías 17, 7-8.
El oro es el metal más apreciado. No se oxida, no se pone feo por el medio ambiente como la plata y el cobre.
Por eso el oro simboliza el valor de las cosas incorruptibles (Job 23, 10; Salmo 19, 7-10; 119, 72.127; Proverbios 8, 10-11, 19, 16:16; Malaquías 3, 3; 1 Pedro 1, 7).
Versos del 12 al 15
Los anillos no estaban en las “esquinas” superiores, sino en cuatro “patas” o “bases”.
Las “varas“, se emplean para transportar el Arca, una vez pasadas por estos anillos, debían descansar sobre los hombros de los hombres que llevarían el Arca durante el tiempo del peregrinaje de Israel.
Estas “varas” debían permanecer en su lugar a fin de evitar el tener que tocar cualquier parte del Arca en el momento de su traslado. No eran parte del Arca en sí, no se cometería ningún sacrilegio al tocarlas o manipularlas (2 Samuel 6, 6-7).
Versos del 16 al 20
El testimonio es el nombre que YEHOVAH DIOS ha puesto sobre las dos tablas de piedra que fueron colocadas en el Arca.
Este texto dice que YEHOVAH DIOS daría a Moisés el Testimonio en el futuro.
Esto alude no solamente a las dos tablas, sino también al Testimonio Mesiánico que iba a ser entregado más adelante a todos los que recibirían el Espíritu del Mesías, como está escrito en Hebreos 3, 5.
Vs 17 el Lugar del Perdón “propiciatorio” es traducido a la palabra hebrea “kaporet” que significa “cobertura”, “cubierta”.
Viene de la raíz “kafar” que significa “cubrir con brea”, “calafatear” y también “perdonar”, “absolver”, “compensar”, “expiar”. Es la misma raíz que hay en la palabra para el día de Expiación (Yom Kippur).
El vocablo así traducido se deriva de una raíz que significa “cubrir“, es decir, “perdonar” el pecado. Representaba la Misericordia Divina.
En forma significativa, el propiciatorio estaba hecho de oro puro, lo que implicaba que la Misericordia es el más precioso de los atributos divinos.
Estaba ubicado por encima de la Ley, así como la Misericordia sobrepuja a la injusticia (Salmo 85, 10; 89, 14).
Eran necesarios el Arca, su Justicia, el Propiciatorio con su Misericordia, para revelar plenamente la manera como YEHOVAH DIOS procede con los hombres.
La Misericordia sin la justicia es sentimentalismo débil, que subvierte todo orden moral. Por otra parte, la injusticia sin la misericordia es severidad moral, impecable en la teoría, pero repugnante a YEHOVAH DIOS y a los hombres.
Los querubines estaban unidos al propiciatorio, uno en cada extremo. Un ala de cada querubín estaba extendida hacia lo alto y la otra estaba doblada sobre su cuerpo (Ezequiel 1, 11), en señal de reverencia y humildad.
La posición de los querubines, con el rostro vuelto hacia el centro y hacia abajo, representaba la reverencia que las huestes celestiales demuestran por la Ley de YEHOVAH DIOS y su interés en el Plan de Redención.
El texto de Éxodo 20, 4 dice “no TE harás” la palabra clave es “te”. En este caso, YEHOVAH DIOS ordenó que se hicieran estos dos querubines en su Santuario.
No es lo mismo que una persona se haga una imagen como representación de algo Divino ¡Eso está prohibido!. Pero en este caso, hay una orden Divina detrás, no es invención del hombre.
Estos dos querubines están adorando a YEHOVAH DIOS que es invisible y que se manifestaba con su luz entre estos dos, debajo de sus alas y encima del Arca.
Como son dos, los hijos de Israel no los confundirían con YEHOVAH DIOS y como están adorando, inclinándose y extendiendo sus alas, no pueden ser confundidos con dioses.
Están señalando hacia Alguien más importante. Los dos querubines nos hablan también de la importancia de la unidad entre hermanos junto al Trono de YEHOVAH DIOS.
Versos del 21 al 22
Este fue el lugar de encuentro entre el YEHOVAH DIOS y Moisés. Esto nos enseña que el lugar donde puedes encontrar a YEHOVAH DIOS está en tu interior, en tu espíritu, en tu corazón.
Ese es el lugar de encuentro íntimo entre YEHOVAH DIOS y tú, en tu espíritu puedes acercarte al Trono de Gracia, el Propiciatorio que está en el cielo.
Versos del 23 al 24
La mesa representa la provisión de YEHOVAH DIOS para el mundo. Por eso no podía estar vacía en ningún momento, siempre tenía que tener pan encima.
En los versos siguiente dejando el Lugar Santísimo, Moisés se dedica ahora a la descripción de los muebles del Lugar Santo.
El primer mueble mencionado es la mesa del “pan de la proposición” o “pan de la Presencia”.
Marcos habla de los “panes de la proposición” en Marcos 2, 26, literalmente, “el Pan de la Presentación”, es el pan presentado a YEHOVAH DIOS, Pablo usa la misma palabra griega en Hebreos 9, 2.
Versos del 25 al 30
Probablemente los platos sobre los cuales se colocaban los panes, “cucharas” eran tazas o potes dentro de los cuales se quemaba el incienso, según puede verse en el bajo relieve de la mesa en el arco de Tito, erigido en Roma para conmemorar la toma de Jerusalén en el año 70 d.C.
Las “cubiertas“, literalmente “jarras” o “jarrones“, y los “tazones” se usaban para las libaciones que acompañaban a las ofrendas (Levítico 23, 13.18.37).
El “pan de la proposición”, consistía en doce (12) panes, renovados cada sábado. Los panes que se sacaban eran considerados sagrados y los comían los sacerdotes en el “Lugar Santo”(Levítico 24, 5-9).
Estos doce (12) panes constituían una perpetua ofrenda de parte de las doce (12) tribus, en señal de gratitud a YEHOVAH DIOS por las bendiciones recibidas diariamente de su mano.
En un sentido más elevado, este Pan señalaba a El Mesías como Pan Espiritual.
El Pan estaba hecho como una caja, pero con dos de sus lados abiertos. Por eso se llama “pan de semblantes”, “lejem hapanim”, porque era como si tuviera rostros, superficies, que miraban a ambas direcciones hacia los lados del Tabernáculo.
La mesa es un lugar de encuentro, un lugar donde hay una relación íntima entre personas. El hecho de comer juntos, es algo que implica unidad, compañerismo y amor.
Versos 31 al 40
El candelabro, en hebreo “menorá”, simboliza la Torá y el Espíritu. La Torá, porque está escrito en el Salmo 119, 105 “Lámpara es a mis pies tu palabra y luz para mi camino”.
El “candelero” tenía una columna central de la cual se desprendían hacia arriba tres pares de ramales que alcanzaban hasta un mismo nivel.
No se dan las dimensiones del candelero, pero estaba hecho de oro macizo. Sus ramales estaban decorados con “copas” en forma de almendras, con “manzanas” o capiteles que, al parecer, podrían ser como granadas y con “flores“.
Una por una, las lámparas del candelero eran atendidas cada noche al ponerse el sol y nuevamente a la mañana (Éxodo 27, 20-21; 30, 7-8; Levítico 24, 3-4).
Nunca quedaban todas apagadas a la vez. Al entrar el sacerdote en el Lugar Santo, el candelero estaba a su izquierda, es decir hacia el sur (Éxodo 40, 24).
En el Vs 38 “despabiladeras y ceniceros de oro puro” eran pinzas o instrumentos para despabilar o limpiar las mechas de las lámparas.
Se emplearán “un talento de oro” es un valor equivalente a un peso de 34,19 kg (75,38 libras). Esta cantidad de oro forma un cubo de 12,06 cm (4 3/4 pulgadas) de lado, ó 1,754 cm3 (107 pulgadas cúbicas).
En cierto sentido, el “candelero” también representa al pueblo de YEHOVAH DIOS como la luz moral y espiritual del mundo, en forma individual (Mateo 5, 14-16; Filipenses 2, 15) y como iglesia (Apocalipsis 1, 12. 20).
Representaba también el poder del Espíritu Santo para alumbrar al cuerpo del Mesías (Zacarías 4, 2-6; Apocalipsis 4, 5).
Sin embargo, en el más alto sentido señala a nuestro Señor y Salvador Yeshúa Ha Mashíaj (Juan 9, 5), quien es la luz del mundo (Juan 1, 4.8.12; 12, 46) e imparte al alma “toda buena dádiva y todo don perfecto” que desciende del “Padre de las luces” (Santiago 1, 17).
Gloria a YEHOVAH por esta directriz de RUAJ HA KODESH para que como su Novia Santa nos santifiquemos aun más, llenos a rebosar de su Palabra con este acompañamiento….