Versos del 1 al 14
En este capítulo continúa el poema describiendo el juicio de YEHOVAH contra la región de Moab.
Quienes no perdían ocasión para revelarse contra Israel desde el periodo del Rey David, ellos quedaron sujetos a una relación de vasallos, por causa del dominio que impuso Israel sobre la región.
Este acuerdo consistía en proporcionar corderos para los sacrificios del Templo, sin embargo, a la menor muestra de debilidad de los israelitas, se sublevaron resistiéndose a entregar los tributos.
Por lo que la sentencia de YEHOVAH dada a conocer por el profeta Isaías, de la devastación de su territorio, llegaría en un lapso no mayor a los tres años de su pronunciamiento.
La soberbia de los líderes moabitas, les daba la certeza que con la muerte de Ajaz, podrían liberarse definitivamente del dominio de Israel.
No pudieron advertir que su rebeldía les expondría como un pueblo fácil de invadir, por sus notables debilidades para su autoprotección.