Versos del 1 al 26
Paz con Antíoco. Estos acontecimientos están narrados en 1 Macabeos 6, 18-63 y corresponden al año 163 a.C.
No sabemos por qué el rey y su tutor Lisias rompen el pacto firmado con Judas, lo que sí queda claro es que el prestigio de Judas Macabeo llega a su máxima expresión al vencer al mismo rey y a su tutor Lisias.
Menelao es un “renegado” al que todo le sale al revés (vs 3-8), un traidor cuya muerte es lógica dentro de la ley de la retribución basada en la ley del Talión.
El título “misericordioso” ratifica que estamos en la sección de la misericordia divina para con los judíos.
A la oración que precede el combate, Judas le añade un acto de democracia, consultando al consejo de ancianos sobre la mejor decisión (vs 12-13).
La motivación para el combate sigue siendo los tres valores que caracterizan la religión judía y la razón de ser de la lucha de Judas Macabeo, Ley, Templo y patria (vs 10. 14).
Las noticias de un golpe de estado tramado por Felipe, obligan al rey a establecer un pacto con los judíos reconociendo sus demandas.
2 Corintios 10, 4 “No, las armas de nuestro combate no son carnales, pero, por la fuerza de Dios, son suficientemente poderosas para derribar fortalezas. Por eso destruimos los falsos argumentos”.
El éxito del ejercito Macabeo se basó en la convocatoria de tres días de ayuno y oración delante del Santuario de YEHOVAH Dios, el Omnipotente trasladó Su ira de corrupción, hacia el pueblo por su idolatría dejándola caer sobre los traidores del Pueblo Santo.
Es así como Antíoco resolvió exterminar a Menelao, de igual forma la providencia Divina debilitó hasta sus cimientos el poderío del ejercito griego, hasta el punto que ya no solo los generales de Antíoco, sino que él mismo, pidió a Judas Macabeo hacer la tregua debido a que por el Poder del Dios Omnisciente se contaba por decenas de miles.
De allí que todas las condiciones para la tregua, solicitadas por Judas fueron aceptadas, por el rey sirio Antíoco.