Versos del 1 al 2
En este momento de gran triunfo, llevando el Arca a Jerusalén, el cronista nos recuerda que David vivía en una casa o varias casas y el Arca del Pacto estaba en una tienda.
Significativamente, esta tienda que David arregló para el Arca no era el Tabernáculo.
El Tabernáculo de Moisés estaba en Gabaón (1 de Crónicas 16, 39-40).
Había varias razones para explicar por qué David no llevó el Tabernáculo de Gabaón a Jerusalén:
· Pudo haber pensado que si el Tabernáculo estaba ahí el pueblo se sentiría satisfecho con eso y perderían la pasión y la visión del Templo que YEHOVAH DIOS deseaba construir.
· Puede ser que el Tabernáculo solo se movía cuando era absolutamente necesario, como cuando vino el desastre sobre Silo o Nob.
· David simplemente se enfocó en construir el Templo, no en continuar el Tabernáculo.
El Arca de YEHOVAH DIOS no debe ser llevada sino por los levitas.
David aprendió de su error pasado cuando Uzzá fue herido de muerte en el primer intento de llevar el Arca del Pacto a Jerusalén.
Versos del 3 al 10
Un problema importante para muchos lectores es la manera en que la narrativa es interrumpida por listas repetitivas.
Por ejemplo, justo en el momento en que el Arca es puesta sobre los hombros de los levitas, aparecen listas aparentemente no relacionadas de músicos y porteros.
Las listas en realidad tienen una función importante en anticipar la siguiente sección de la narrativa.
Se demuestra que los levitas que se santificaron a sí mismos, tienen una ascendencia válida, este era un asunto importante en el Israel post exílico
Versos del 11 al 15
Ahora el Rey David trae el Arca del Pacto a Jerusalén de la forma correcta.
Había aprendido la lección, el proceso también es importante para YEHOVAH DIOS, no solo el resultado.
1 de Crónicas 13, 1-4 deja claro que David consultó con sus líderes y con el pueblo de una manera bastante democrática.
Lo que no hizo fue, consultar con YEHOVAH DIOS sobre la ordenanza correcta.
Versos del 16 al 24
El rey David sabía mucho sobre música y canto, pero no se sobrecargó en esta ceremonia.
Delegó la responsabilidad y permitió que los principales de los levitas, designasen como hermanos cantores.
Kenonías era el cantante principal, daba el tono y el tiempo, presidía en la “elevación”, que significa “ajustando el tono”, era muy hábil en la música, poderoso en su voz y bien calificado para dirigir la banda, pudo haber sido el director del coro.
Los muchos instrumentos musicales mencionados eran importantes, pero no más importantes que estas gozosas voces. El canto era fuerte y alegre.
Berekías y Elcaná eran porteros del Arca, designados para cuidar la puerta de la tienda, en donde sería puesta y guardada el Arca, para que ninguna persona no autorizada entrara y la tocara, de la misma manera debían asistir al Arca en el camino y cuidarla de ser tocada por manos profanas.
Versos del 25 al 28
David se alegró al saber que la Presencia y Gloria de YEHOVAH DIOS podían traer bendición en vez de maldición.
También se alegraba de ver que cuando obedecían a YEHOVAH DIOS, eran bendecidos.
Definitivamente, mientras el protocolo de la adoración dentro de la ordenanza correcta seguía el curso ceremonial, no impedía las demostraciones de un pueblo lleno de júbilo, alegría y felicidad.
Es un error aseverar que la adoración “real” debe ser suave, solemne o sólo en un tono menor penitente.
No era tanto que el Arca del Pacto fuera tan pesada, como para que necesitaran la ayuda de YEHOVAH DIOS para cargarla.
Más bien, había una presión considerable y estrés en llevar una carga, que recientemente había terminado en una muerte repentina.
Ellos necesitaron la ayuda de YEHOVAH DIOS, para poder lidiar con la presión espiritual de este Ministerio.
David fue cuidadoso al no descuidar la institución del sacrificio, en este segundo intento, por llevar el Arca del Pacto a Jerusalén.
2 de Samuel 6, 13 dice que hacían sacrificios cada seis pasos en la procesión, muchos dicen que esto lo hacían “Porque Uzzá murió cuando solo había dado seis pasos”.
Todo hombre que ve a otro golpeado y a sí mismo perdonado, ofrecerá sacrificios para celebrar una pascua para sí mismo.
Es un error pensar que David fue inmodesto, David se vistió como todos los otros sacerdotes y levitas en esta procesión.
La organización de este evento fue más grande que en el primer intento, David fue lo suficientemente sabio.
El problema con el primer intento no fue por causa de deficiencia de ofrendas sacrificiales, sino que fue una gran ofrenda sacrificial para complacer al hombre y no a YEHOVAH DIOS.
Este es en esencia el mismo relato registrado en 2 de Samuel 6, a excepto que en 2 de Samuel se hace hincapié en el liderazgo de David, mientras que en este capítulo de Crónicas se hace énfasis en la participación y el apoyo de todo Israel.
Ambos relatos son correctos, David era el líder, pero no era un espectáculo individual, llevaba todo Israel el Arca.
El cambio principal es que el regreso del Arca a casa, se ha vuelto un acto corporativo de todo Israel, en vez, de una expresión de la Fe personal de David.
Verso 29
David no contuvo nada en su propia expresión de adoración. No bailó por obligación, sino por adoración de corazón.
David estaba feliz de traer el Arca del Pacto de YEHOVAH DIOS a Jerusalén según la Palabra del Altísimo.
Esta expresión del corazón de David, muestra que tenía un vínculo emocional genuino con YEHOVAH DIOS.
Hay dos grandes errores en esta área, el error de hacer de las emociones el centro de nuestra vida cristiana y el error de llevar una vida cristiana emocionalmente desapegada.
En la vida cristiana las emociones no deben ser manipuladas, ni tampoco reprimidas.
El contexto claramente lo pone junto con los otros sacerdotes y levitas, probablemente danzó con sencillos pasos rítmicos, junto con los otros hombres de la misma manera en la que en la actualidad se puede ver bailar a los judíos ortodoxos.
En este contexto, el efod de lino de David significa que se despojó de sus prendas reales y se vistió como cualquier otro, en esta procesión.
También se debe observar que la danza de David fue apropiada en el contexto. Este fue un desfile con una banda, una gran procesión. La danza de David encajaba perfectamente.
Si David hubiera hecho esto cuando la nación se reuniera en el Día de la Expiación estaría mal y fuera de contexto.
2 de Samuel 6, 20-23 nos dice más de la queja de Micol (Mical) y de la respuesta que le dio David.
Ella le dijo sarcásticamente “¡Cuán honrado ha quedado hoy el rey de Israel, descubriéndose hoy delante de las criadas de sus siervos, como se descubre sin decoro un cualquiera!”.
Mical parecía indicar que ella no se oponía a la danza de David, sino a lo que David vestía cuando se despojó de sus vestiduras reales y que bailó como cualquier otro hombre celebrando en la procesión.
David actuó como si fuera cualquier otro adorador en Israel y esto ofendió a Mical.
En respuesta, David le dijo a Mical que sus acciones fueron delante de YEHOVAH DIOS.
Es decir, simplemente explicó la verdad “Lo hice por YEHOVAH DIOS, no por ti”.
El continuó explicándole y aun me haré más vil que esta vez. Lo que David hizo fue humilde, no bailó para mostrarles a otros lo espiritual que era.
El incidente ilustra la perpetua incapacidad de los de mente terrenal de apreciar, la alegría de lo espiritual.