Versos del 1 al 15
En la tierra, vid frondosa. De los cuidados con que YEHOVAH plantó la vid, se esperaba una cosecha buena y abundante, pero sucedió que esa misma abundancia fue el motivo de la perdición de Israel.
Quizá sintió que no necesitaba más de su DIOS y por eso se entregaron a la idolatría, dejando a un lado el culto al verdadero YEHOVAH, el cual debía estar basado en el temor de YEHOVAH y en la justicia.
Con ello, Israel se convirtió en una vid seca, sin fruto.
Cuando caiga en la cuenta de sus desvíos se avergonzará y hasta se deseará la muerte, pero ni eso encontrará. Irremediablemente, Israel tendrá que pagar por su culpa.