Versos del 1 al 3
Las mujeres de Moab lograron que los hombres de Israel se prostituyeran, los sedujeron tanto al pecado sexual, como a la idolatría y se inclinaron a sus dioses.
Los dos eran comúnmente conectados en formas perversas de adoración de ídolos en el mundo antiguo.
En este capítulo, las mujeres y su pueblo son algunas veces descritas como Madianitas y algunas veces como Moabitas.
Esto es porque los Madianitas era un grupo nómada, y en este tiempo, estaban en grande números entre los Moabitas.
Baal era el gran Canaanita dios de la fertilidad, y la adoración de Baal era un constante incitación para los hijos de Israel.
Balaam profetizo desde Bamot-Baal ya lo vimos en Números 22, 41, posiblemente de este mismo lugar Baal Fogor.
El furor de YEHOVAH DIOS se encendió contra Israel: “Balac nunca pudo haber pagado suficiente dinero a Balaam para hacer al Altísimo maldecir a Israel”.
En el capítulo anterior, Balaam intentó maldecir a Israel y no pudo; pero ahora, ellos son maldecidos por su pecado en contra del Altísimo.
Aprendemos después en el capítulo que El furor de YEHOVAH DIOS se mostraba a sí mismo en una plaga que comenzaba a derribar miles entre Israel y parecía como si continuaría hasta que toda la nación fuera consumida.
Lo que un enemigo nunca podría cumplir en contra de Israel, Israel lo hizo por sí mismo a través de la desobediencia.
El mismo principio funciona entre el pueblo de YEHOVAH DIOS al día de hoy.
El ataque más poderoso de satanás en contra de nosotros, nunca podrá hacer tanto daño como nuestro propio pecado y rebelión en contra de YEHOVAH DIOS.
La espada, la maldición de ningún extraño tiene el poder para dañar a Israel.
Sólo uno mismo puede traer desgracia, al separarse de YEHOVAH DIOS, desobedeciendo su ley.
Los moabitas siendo ahora vecinos de los israelitas, encontrándose incapaces de efectuar su diseño en contra de Israel por guerra y hechicería, ahora ellos, encontraron otra manera de trabajar.
De la misma manera, la violencia de satanás y brujería no pueden tener una influencia duradera en el hijo de YEHOVAH, pero, si puede llevarlos al pecado y puede ser destruido.
El furor de YEHOVAH DIOS se encendió contra Israel: “Balaam había hecho lo posible para maldecir a Israel, pero fue un fracaso”.
Sin embargo, su amor por el dinero no dejaría que el asunto terminara sin complacer al hombre que lo contrató, el rey de Moab.
2 Pedro 2, 15-16 habla de Balaam y su amor por el dinero, usándolo como un ejemplo de falsos profetas futuros: “Han dejado el camino recto, y se han extraviado siguiendo el camino de Balaam hijo de Beor, el cual amó el premio de la maldad, y fue reprendido por su iniquidad; pues una muda bestia de carga, hablando con voz de hombre, refrenó la locura del profeta”.
Apocalipsis 2, 14 hace la conexión entre el intento fallido de Balaam de maldecir a Israel y esta idolatría subsecuente:
“Pero tengo unas pocas cosas contra ti: que tienes ahí a los que retienen la doctrina de Balaam, que enseñaba a Balac a poner tropiezo ante los hijos de Israel, a comer de cosas sacrificadas a los ídolos, y a cometer fornicación”
Esencialmente, después de su fracaso de maldecir a Israel, Balaam le dijo a Balac: “Yo no puedo maldecir a este pueblo.
Pero tú puedes hacer que se maldigan a sí mismos por medio de incitarlos a rebelarse en contra de YEHOVAH DIOS.
Envía a tus mujeres bonitas entre ellos, y diles que inciten a los hombres de Israel a la inmoralidad e idolatría.” Y funcionó.
Balaam, por medio de su consejo impío a Balac, consiguió lo que quería, pero él también terminó muerto entre los enemigos de YEHOVAH DIOS (Números 31, 7-8).
Él solamente disfruto su dinero por un corto tiempo.
Versos del 4 al 5
YEHOVAH DIOS determinó importante que los ofensores fueran juzgados abiertamente, este no era un pecado para mantenerse escondido.
Los pecados abiertos deben ser tratados abiertamente.
Maten a cada uno a aquellos de los vuestros que se han juntado con Baal-Fogor, porque cuando el pecado es tolerado o aprobado en una cultura, es una muestra segura de decadencia y Moisés no aceptaría la decadencia.
Él ordenó a la comunidad que trajeran a los ofensores para ser juzgados, para mostrar que ellos no aceptarían este tipo de pecado en medio de ellos.
Versos del 6 al 9
Finjas era uno entre estos en Israel que no aceptarían esta venta al por mayor de rebelión en contra de YEHOVAH DIOS.
Él satisfizo el juicio de YEHOVAH DIOS, al traspasar a un Israelita y una medianita con una lanza, aparentemente mientras ellos estaban en el medio de la inmoralidad.
Este hombre estaba teniendo sexo con la medianita justo frente del Tabernáculo y el texto deliberadamente obscurece esto, porque es muy ofensivo.
Estos versos refiere a que cesó la mortandad de los hijos de Israel, “Finjas probablemente no era el único que pusiera tal estándar para la justicia”.
Pero el suyo fue el acto singular que detuvo la plaga.
Podemos pensar que nuestro propio estándar para la justicia, no hace diferencia en la impresionante marea de pecado alrededor de nosotros.
Pero YEHOVAH DIOS puede honorar un solo acto justo y causar que haga la diferencia.
Veinticuatro mil murieron en la plaga. Esto debió haber deleitado a Balac, rey de Moab.
Él sabía que Balaam tendría éxito en maldecir a Israel o en cambio, en conseguir que ellos se condenaran.
Versos del 10 al 13
YEHOVAH DIOS no sólo notó la obediencia de Finjas, también lo noto que él era celoso, con su celo entre ellos.
Finjas, era apasionado acerca de las cosas en las que YEHOVAH DIOS era apasionado y en este aspecto, era un hombre con un corazón, conforme al propio corazón del Altísimo.
YEHOVAH DIOS Bendijo a Finjas, con la promesa de que él sería el descendiente de Aarón, por el cual pasaría el Sacerdocio.
Esto era apropiado, porque fue el celo de Finjas lo que hizo expiación por los hijos de Israel, justo como lo hace el Sacerdote que debe ministrar la expiación.
Versos del 14 al 18
Ellos no debían mostrar tolerancia hacia aquellos que traen el pecado en su centro y cambian sus corazones lejos de YEHOVAH DIOS.
Además, debían luchar contra los madianitas en cada oportunidad que tuvieran.