Versos del 1 al 13
Pecados y castigo de Judá. La denuncia de los pecados de Judá y el anuncio de su merecido castigo (vs 1-4) dan pie para la mención de una maldición dirigida a quien se aparta del Señor (vs 5-6).
Además de una bendición o bienaventuranza para quien se mantiene esperando siempre confiado en el Señor (vs 7-8).
Los versos del 9 al 13 son una especie de meditación sapiencial, que llama a mantener la fidelidad y la confianza sólo en Dios.
Versos del 14 al 18
Confesiones de Jeremías, incredulidad. En esta oración sálmica se subrayan especialmente dos elementos.
Por una parte, el pueblo se burla del profeta porque sus palabras no se cumplen (vs 5).
Por otra, la reacción humana del profeta que pide a YEHOVAH DIOS venganza y castigo contra todos.
Es obvio que actitudes como estas van a quedar superadas por Jesús cuando enseña que hay que amar a los enemigos y orar por quienes nos persiguen (Mateo 5, 44).
Reprende a sus discípulos que piden un castigo contra aquella ciudad, que no quiso recibirlos (Lucas 9, 54-55).
Sin que esto quiera decir, que hay que estar sumisamente dispuestos a sufrir la violencia de los otros.
Jesús llama a interrumpir la cadena de venganzas y violencia, pero al mismo tiempo busca que la otra parte cese también en sus actitudes violentas.
Versos del 19 al 27
Se debe obedecer y hacer de mano de YEHOVAH DIOS o se camina de la mano de la idolatría, por ello, la importancia de cumplir sus mandatos, normas y decretos.
El profeta expresa claramente la importancia que reviste para YEHOVAH el que obedezcamos el cuarto mandamiento de Santificar sus Fiestas (Deuteronomio 5, 12) que incluye el Shabbat.
Si el pueblo de Judá hubiese guardado el descanso semanal, no hubiese sido arrasado por sus enemigos.
De hecho en la advertencia hecha por Jeremías de parte de YEHOVAH en el vs 25 y 26 relata que de cumplir cabalmente con los días de reposo, el reino de Judá prevalecería para siempre delante de todos sus enemigos.
Sin embargo, los reyes y el pueblo sucesivamente tentaron a YEHOVAH DIOS al no guardar el Shabbat deliberadamente.
Por lo que en el fin del asedio del reino de Judá del Sur se cumplió literalmente, la advertencia descrita por YEHOVAH en boca del profeta Jeremías expresada en el vs 27.