LECTURAS
DEL SHABBAT
EVANGELIO
Lucas 3, 10-18
1RA LECTURA
Sofonías 3, 14-18
2DA LECTURA
Filipenses 4, 4-7
SALMO
Isaías 12, 2-6
Reflexión de la Palabra Semanal
El evangelio trata de buenas noticias y este mes noveno de primeros frutos nos centramos en el fruto por excelencia en Yeshúa Ha Mashíaj nuestra gavilla de primicias.
En Él todo es Salvación y Vida abundante para la ekklesía, para la novia que ha sido cortada y apartada del mundo, la carne y el demonio para vivir devocionalmente en la comunión en santidad, apegada al Bien Amado Dueño y Señor, Amantísimo Esposo Fiel Yeshúa Ha Mashíaj.
Durante este mes solo profecías de: la victoria final de nuestro Bienamado sobre el pecado, la muerte y sobre la serpiente antigua y satanás.
Los tiempos de Yehováh son cíclicos en un margen de aplicación más amplio, es así como el juicio que se dio en el año 70 de nuestra era sobre la tierra de Jerusalén acontecerá en el tiempo del fin con un impacto planetario porque la simiente de Abraham se impone con salvación para los creyentes de todas las naciones.
Yeshúa en su primera venida nos mostró y entregó el espíritu de la ley para que la Ekklesía viva en Pacto Matrimonial con su Salvador, por medio de la observancia de la Ketubá con la asistencia de los dos testigos, el Logos y el Rhema representados por Moisés y Elías que sustentan de Fidelidad y Paz a la novia hasta la Parusía, donde la misericordia y la justicia de Yehováh son los bienes reservados para quienes han perseverado en ser santos como el Padre de los cielos es Santo.
En este orden de idea, la Primera Lectura de hoy tomada del libro del profeta Sofonías, cuyo nombre significa Dios protege, nos muestra que, terminada la guerra contra los idólatras, Yehováh se dispone a salvar, cuidar y cultivar a la Ekklesía Santificada confirmándola como esposa y estableciendo su morada en la Jerusalén celestial cuyos atributos principales son la Justicia que emana del novio y la paz que refleja la novia en un ambiente de júbilo festivo que prevalece por la eternidad.
Toda la escritura de tapa a tapa revela el Plan de Salvación, que tiene su impacto cumbre y se sostiene en el tiempo a partir de las Bodas del Cordero.
En lo que respecta a la Segunda Lectura, Pablo revela a los filipenses que la actitud de la novia que espera la consumación de la Buena Nueva, es mostrarse en todo tiempo con alegría, porque el Señor está cada vez más cerca, por lo que, el testimonio de la novia ante el mundo está basado en una resuelta confianza en las promesas de su hacedor, Yehováh Dios de Pacto.
En todo esto la paz que experimenta la novia que sobrepasa todo entendimiento es el fruto de tener la mente continuamente gravitando en la Palabra de Vida del Amado, en sus mandamientos y en sus promesas, con tal obediencia que se constituyen en la roca inamovible que da impulso constante al carácter de santidad del creyente.
En cuanto al Evangelio, Lucas nos muestra una pincelada del testimonio de la predicación de Yohanan Ben Zejaria o Juan el Bautista, quien dicta sobre aspectos de la ética y la moral que debe regir en todo aquel que aspira a ser salvado por el sacrificio de Yeshúa Ha Mashíaj en la cruz del calvario.
Cada uno debe ejercer su profesión con decoro, sin abusar de su estatus como herramienta para menospreciar al prójimo, el Amor es el enfoque fundamental de nuestras relaciones por tal motivo toda ocasión es buena para servir al prójimo atendiendo la enseñanza de que la ley y los profetas se cumple en tratar a los demás como deseamos ser tratados.
En Yohanan el arrepentimiento nos lleva a colocar nuestro interés en sujetarnos a la instrucción del Logos de Yehováh, es un bautismo que nos induce la responsabilidad por obedecer los Mandamientos de Yehováh, mientras que el bautismo en Yeshúa restaura la comunión perdida de nuestro espíritu con el Ruaj Hakodesh del Padre, que nos capacita para vivir en una relación estrecha con el amado Yeshúa, alentados por la adoración continua a nuestro Padre Creador que nos capacita para obedecer Su Palabra que finalmente nos capacita para servir en su presencia.
Necesitamos ser el trigo que Yehováh almacena en sus graneros, necesitamos fructificar a partir de nuestra dependencia total de Yehováh como los primeros frutos que imprimen bendición en la tierra como nuestro amado Yeshúa Ha Mashíaj, primicia de don perfecto que llena la tierra con el trigo que es el Pan de Vida que trae salvación a todo el que come de Él, equipándolo para convertirse en la buena cosecha de santos para la vida en el Reino Milenial y en el Reino Definitivo.
“¿Entonces qué hacemos?” Esta es la hermosa pregunta que le hacen a Juan Bautista, hermosa porque denota que ya se ha visto el problema y se quiere trabajar para resolverlo. Juan les ha convencido de que tienen pecado y el corazón se ha abierto a la conversión como preparación a la segunda venida del Mesías.
Todo esto, será ampliado profundamente en la hermenéutica del shabbat semanal que el Padre misericordioso ha tenido a bien, compartirnos en este día santo de descanso a continuación…
Gloria a YEHOVAH DIOS porque es grande el Santo de Israel, gloria a su santo nombre pues ha hecho maravillas en todo tiempo y no se cansa de hacerlo. Se ha escogido y ha apartado un Remanente, su Ekklesía santificada, pobre y humilde; Pobre porque depende única y exclusivamente de Él y Humilde porque camina la milla extra sujetada a su cabeza, fu fuente legal, por ello vive alegre, confiando plenamente en su Creador.
Gloria a YEHOVAH DIOS por su Palabra que nos vivifica y nos limpia de todo pecado. Solo en Yeshúa Ha Mashiaj encontraremos victoria.