Mosqueteros de Yehovah

El Justo es uno que Gobierna de acuerdo a la Voluntad del Altísimo

LECTURAS

DEL SHABBAT

EVANGELIO

Marcos 9, 30-37

1RA LECTURA

Sabiduría 2, 12. 17-20

2DA LECTURA

Santiago 3, 16- 4,3

SALMO

54, 3-6. 8

Reflexión de la Palabra Semanal

Los discípulos de Yeshúa Ha Mashíaj son la Ekklesía, por tanto, viven bajo la disciplina de la cultura del Reino de Yehováh, donde Reino, significa sujeto a Sus Mandamientos, Estatutos, Ordenanzas y no lo podrán hacer a menos que realmente sean Ekklesía que significa, los llamados fuera del mundo, de la carne y del demonio.

Aunque usted no lo crea el término iglesia viene de la raíz griega kirke, que significa círculo, lo que luego pasó a ser el circo, lugar de entretenimiento de los griegos y de los romanos, por esta razón etimológica, no en pocas iglesias hoy, sobreabundan de payasos actores hipócritas, que como dice Pablo a Timoteo hablan de la eficacia de la piedad, pero no la practican.

Es increíble como quienes atacan a la Ekklesía no son los abiertamente perdidos, sino los falsos adoradores del Dios Viviente Yehováh de los Ejércitos.

Sin embargo, esto no puede sorprendernos puesto que los anticristos en el tiempo de Yeshúa fueron los mismos sumo sacerdotes y la mayoría absoluta del sanedrín, quienes veían en Yeshúa una amenaza extraordinaria para sus intereses con respecto a la dominación del pueblo, por medio de sus tradiciones de hombres.

No era necesario entonces, como tampoco lo es ahora, salir de la iglesia para presenciar la apostasía. Allí la encontramos sin lugar a duda, los supuestos maestros de la Palabra de Dios carecen de la unción propia de quien practica permanentemente la piedad.

Hoy en la Primera Lectura vemos cómo los impíos hacen planes para destruir la vida de los justos, porque le son un estorbo su sola presencia les recuerda sus pecados, por lo que aborrecen en gran manera a los ungidos discípulos de Yeshúa Ha Mashíaj, sin darse cuenta que metiendo guerra contra los servidores de Yeshúa, se están oponiendo directamente a Yehovah a quien dicen amar y servir.

Es insólito que algunas iglesias validen como positivo las posturas que Yehováh llama abominación en las Santas Escrituras.

Peligrosamente todo ignorante de la Palabra de Yehováh avala posturas que presentan como justos, oponiéndose directamente a la Ley de Yehováh.

Pretenden en última instancia quitarse la careta de tolerantes y emprender un combate a muerte con quienes defienden los limites establecido por Yehováh en las Escrituras Sagradas.

El autor enseña la verdadera sabiduría que lleva a la justicia y a la vida para todos. No se trata de la cultura que se conquista por el pensamiento y por el esfuerzo humano, sino, de la sabiduría que viene de Yehovah y produce la justicia, oponiéndose a la idolatría que produce la injusticia.

El Salmo es un lamento individual, que forma parte de un conjunto de salmos que describen las angustias que experimentó David al ser buscado por Saúl y/o asediado por sus enemigos, así como en los Salmos 3, 7, 18, 52, 56, 57, 59, 86, 142.

En esta oración en particular, el salmista expone abiertamente su clamor por ser librado de aquellos que buscaban su vida, hombres violentos y sin Temor de Yehovah.

En el salmo de hoy se muestra un clamor y a la vez, un reconocimiento porque no hay salvación apartados de Yehováh Dios, el justo no está pendiente de los planes que hace el impío para perjudicarle, confía en que el Padre Creador impartirá la justicia haciendo que los impíos sean atrapados en sus mismas maquinaciones diabólicas.

Yehováh interviene preservando la vida de sus ungidos, para que completen su parte en la obra de salvación que edifica la verdadera Ekklesía en todas las edades de la humanidad.

En el Evangelio de hoy, el tema del diálogo no es introducido por Yeshúa sino por la discusión que los discípulos venían teniendo en el camino. El silencio de los discípulos en el verso 34 a la pregunta de Yeshúa, muestra cuán incómodos se sienten. Ellos son conscientes de que su discusión no es un buen tema, especialmente después de que su maestro les ha anunciado los acontecimientos por venir.

Esta discusión es un ejemplo concreto de la falta de entendimiento de los discípulos sobre lo que el Ungido de Yehováh les decía en el camino. Yeshúa acaba de anunciar su disposición a mantenerse en su propuesta de servicio y entrega, mientras los discípulos se entretienen discutiendo quién es el mayor.

Yeshúa no descalifica la discusión de los discípulos, sino que cambia radicalmente la perspectiva: “si alguno quiere ser el primero, será el último de todos y el servidor de todos” (vs 35),  poco queda de la discusión de los discípulos. El primero debe hacerse el último y servidor de todos. Ser el más grande no es un privilegio, sino, un acto de servicio a los demás. El hijo del hombre es un ejemplo de ello, su perseverancia hasta la muerte lo ilustra claramente.

Luego, Yeshúa toma un niño o una niña, en griego es neutro, así que puede ser uno u otra. Yeshúa lo recibe, lo saca del lugar de invisibilidad y lo coloca junto con Él en el centro dándole un lugar de privilegio. Este niño ocupa ahora el lugar que todos queremos ocupar.

Aquí está lo importante que Yeshúa quiere enseñar: LO IMPORTANTE NO ES QUIEN SEA MÁS IMPORTANTE ENTRE LOS SEGUIDORES DE Yeshúa, PUESTO QUE EL MÁS IMPORTANTE HA DE SER EL QUE PORTE LA UNCIÓN INDEPENDIENTEMENTE DE LOS CANONES HUMANOS.

Cuando Samuel ungió a David, en apariencia era un muchacho insignificante, pero por causa de la unción venció a Goliat y paso a ser el esposo de la hija del rey Saúl.

Hoy las lecturas nos enseñan como los impíos se centran en hacer guerra no a cualquiera, sino a aquellos ungidos con poder y autoridad de lo Alto para hacer la obra de Yehováh en la tierra.

Ahora bien, posiblemente ni ellos sepan cuál es el motivo de su odio, porque son títeres de satanás mientras están convencidos de estar haciendo lo correcto.

Finalmente, en la Segunda Lectura, Santiago nos da una cátedra sobre como diferenciar las intenciones carnales y los frutos que produce, en contraposición con los frutos propios de quien se cultiva en la sabiduría de Yehováh, los carnales siempre verán a los portadores de la unción de Yeshúa como sus enemigos.

Todo esto será estudiado en detalle en la hermenéutica que el Padre misericordioso trae para ser disfrutada en este shabbat de delicias a continuación……

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